Emanuel Moriatis arrasó con todo en el "Gálvez". Ganóla clasificación, una de las series y la final, de punta a punta. Festejaron los hinchas de Ford. Como siempre, en el autódromo porteño "Oscar Gálvez" los espectáculos del TC son entretenidos. Emanuel Moriatis fue un rayo, ganando de punta a punta la duodécima prueba del certamen. No hubo lucha adelante, pero sí una gran batalla estuvo atrás, donde Norberto Fontana dio otro paso en busca del título. Fontana largó mal y no le quedó otra que remar con su Dodge. Cuando comenzó la recuperación, el primero que se bajó fue José Ciantini, uno de los que le podía hacer fuerza. Después se entreveró en un duelo fantástico con Diego Aventín. Hubo roces y toques. El "Pumita" abandonó y el arrecifeño se aferró a la segunda posición. Tremendo. Encima, Aventín, Gabriel Ponce de León y Omar Martínez, los que siguen en el certamen, abandonaron, por lo que el ex Fórmula 1 no dejó pasar la oportunidad y estiró su ventaja. El podio se completó con Patricio Di Palma. Con su Torino realizó un trabajo fino y silencioso. Aprovechó todas las oportunidades que se le presentaron. Los despistes y abandonos. De a poco fue subiendo hasta que quedó tercero, y nunca más dejó ese escalón. Cuarto se metió otro que avanzó mucho, como el campeón Juan M. Silva, y quinto fue Matías Jalaf. Adelante, Moriatis fue inalcanzable, convirtiéndose en la gran figura en el "templo del automovilismo argentino". Las hizo todas. Ganó la clasificación, la primera en su campaña en el TC; se impuso en la serie más rápida, y después los aplastó en la final. En un circuito con tanta historia como es el "Gálvez", el "Manu" Moriatis mostró su categoría y con un auto de otro planeta logró una de las victorias más importantes de su campaña. Encima, todavía tiene posibilidades de lograr el título. Exultante, no se cansó de abrazar a cuanta persona se le acercara para saludarlo. Así se mostró Moriatis después del aplas- tante triunfo conseguido en el "Gálvez". No obstante, en medio de tanta algarabía, enfatizó que "tenía un ca-ño". "La prueba se ganó en el taller, porque me entregaron un auto bárbaro", señaló Moriatis. Más adelante, destacó que "felicito a todo mi equipo porque supieron recuperar un auto que en algún momento me puso algunas dudas". "Me vino muy bien la lu-cha entre Fontana y Aventín porque pude sacar diferencias rápidamente y después pude regular. Estaba esperando un triunfo así, por todo lo que significa ganar en el 'Gálvez' y su marco de gente, es una sensación sin igual. La verdad, lo soñé de esta forma". |