Daniel Montenegro tuvo otra actuación soberbia y lideró a Independiente en la espectacular victoria sobre Lanús, por 4-2. Gracias a la categoría de Rolfi, el equipo de Jorge Burruchaga pudo disimular varios errores que le permitieron al 'granate' meterse en partido, cuando prácticamente estaba liquidado. En un primer tiempo parejo, el 'rojo' fue el que tomó la iniciativa. Pero sólo manejó la pelota hasta tres cuartos de cancha porque al llegar al área fue dominado por la defensa local. El control del balón del visitante se acrecentó a partir de los 19, cuando Fabbiani, tontamente, se hizo expulsar por una patada sin pelota a David Abraham. El juego, entonces, se inclinó hacia el arco local. A los 34, en un avance que comenzó Armenteros, Graieb tocó la pelota con la mano cerca del área de Lanús y le regaló a Independiente un tiro libre desde inmejorable posición. Montenegro no desperdició la ocasión y con una notable ejecución puso el 1-0 parcial. El dueño de casa contó con dos chances concretas para empatar, por intermedio de Pelletieri y Biglieri. Sin embargo fallaron y el "rojo" se fue en ventaja. El drama y la gloria Ese repunte local se diluyó en el inicio del segundo tiempo. Montenegro, con un centro perfecto, le puso la pelota en la cabeza a Denis, quien doblegó a Bossio. Parecía que todo estaba liquidado, pero Lanús puso todo y aún con un hombre menos empezó a presionar. Así fue que logró descontar a partir de Claudio Graf y empatar, con un cabezazo de Romero. El gol envalentonó más a Lanús, que se olvidó que tenía un jugador menos. Y esa ambición lo dejó mal parado en defensa. En una réplica letal Montenegro puso de nuevo al frente a Independiente. Ahí terminó todo porque Lanús se fue al ataque y el Rojo lo liquidó de contra cuando Marín ingresando solo remató abajo de zurda, venció la resistencia de Bossio y mantuvo a su equipo cerca de la punta. |