El Barcelona, que mostró el viernes su rostro vulnerable en la Supercopa de Europa, donde el Sevilla le sacó lo goleó,intentará hoy despejar sus dudas en la visita al Celta de Vigo. En el equipo catalán no estará presente Ronaldinho, lesionado. De repente, todo el mundo se dio cuenta de que el Barcelona es mortal, que no se trata de un equipo invencible. El Sevilla lo derrotó por 3-0 el viernes y casi se habló de una epopeya. Enfrente tendrá un Celta de Vigo que intentará demostrar que el éxito de la pasada temporada, donde se clasificó para la Copa de la UEFA, no es una casualidad. El técnico azulgrana Frank Rijkaard no quiere mirar atrás y cree que no hay que dar mayor trascendencia a la última derrota. "Sólo es un partido. La Liga es muy larga y tenemos muchos partidos. Una decepción así no cambia la opinión de mi equipo. Sigo trabajando con confianza", declaró el holandés. Para jugar ante el Celta, Rijkaard convocó a Lionel Messi, pero como era de esperarse dejó afuera a Javier Saviola. |