| Michael Schumacher dio ayer un paso más en su caza del español Fernando Alonso al lograr una notable victoria en el Gran Premio de Alemania. Encima, el triunfo del alemán tuvo doble significado, porque fue escoltado por su compañero de equipo en Ferrari, el brasileño Felipe Massa, y el finlandés Kimi Raikkonen. Alonso terminó quinto con su Renault y su ventaja al frente del Mundial de Fórmula 1 se redujo a 11 puntos a falta de seis pruebas para el final, después de las tres victorias consecutivas de Schumacher. Alonso tuvo dificultades con los neumáticos y nunca pudo siquiera a meterse en la lucha por el podio. Schumacher logró la victoria frente a su afición después de una notable exhibición de Ferrari, que se encuentra en el mejor momento del certamen. La ventaja mecánica y psicológica parece estar ahora del lado del heptacampeón mundial, quien ayer logró su quinta victoria de la temporada y la 89 de su campaña. Schumacher depende ahora sólo de sí mismo para ganar un nuevo título. "Las próximas pruebas no deberían ser un problema porque tenemos un auto competitivo. Pero hay que esperar que Renault contraataque", señaló. Alonso vio como su ventaja de 25 puntos se redujo paulatinamente en las últimas pruebas, pero no parece desesperar. El jefe de Renault, Flavio Briatore, reconoció también la actual supremacía de Ferrari, después que Alonso perdiera más de 40 segundos en la segunda mitad de la prueba. Pese a la "pole" de Raikkonen, la sesión de clasificación del sábado ya había mostrado que Ferrari y su socio Bridgestone eran superiores a Renault y los neumáticos Michelin. Mientras Schumacher y Massa partieron de la segunda y tercera posición, respectivamente, Alonso tuvo que conformarse con la séptima. Raikkonen consiguió la primera "pole" de la temporada, pero cargó muy poco combustible y su sueño de conseguir su primera victoria desde octubre de 2005 terminó en su primera parada, en la vuelta once. Schumacher se rápido del liderazgo y ya no lo abandonó hasta el final, protegido por su fiel escudero Massa, quien nunca lo inquietó. Alonso avanzó dos puestos en otra de sus espectaculares salidas, pero pronto los volvió a perder. En la prueba, apenas logró recuperar posiciones, su quinta plaza debe agradecérsela principalmente al abandono del australiano Mark Webber. El español intentó apretar el ritmo en las últimas vueltas al británico Jenson Button, pero una salida de pista que a punto estuvo de dejarle fuera de carrera calmó su ímpetu. Alonso tiene una semana para mejorar su auto antes que Schumacher intente darle un nuevo mordisco a su ventaja de puntos en el Gran Premio de Hungría. (DPA y AR). | 
