Tienen más de 30 años, juegan sus últimas fichas mundialistas y son el dúo de voces que utiliza Diego Maradona para ordenar las piezas adentro de la cancha. El Gringo tuvo su partido soñado ante Nigeria, porque fue Lionel Messi el encargado de las maravillas, pero fue él, el discreto Gabriel Heinze, quien le dio la victoria a la Argentina; La Brujita, en cambio, jugó un cotejo discreto y para colmo el físico le pasó factura.
Se esperaba menos de Heinze y más de Verón, pero el fútbol es así, la dinámica de lo impensado. El del Olympique de Marsella fue el mejor de la defensa junto a Sergio Romero, mientras que al volante de Estudiantes le faltó incidencia en el juego, aunque tiene el crédito abierto por calidad y porque en algunos pasajes fue el que mejor entendió al pequeño genio del Barcelona.
Puede que de acá al jueves Maradona cambie algunas fichas, pero nadie duda que Heinze será de la partida. Habrá que ver si Verón deja atrás la contractura en el gemelo de la pierna derecha. algo que él mismo descuenta. "Creo que voy a llegar, es una molestia nada más", dijo después del triunfal debut.
En realidad, al estratega de Maradona lo probaron ayer por la tarde y todo hace pensar que estará en condiciones de jugar. Según aseguran fuentes cercanas al cuerpo técnico, la molestia no es nueva en la pierna hábil de Verón y esa es una de las preocupaciones de Maradona.
La Bruja, como Heinze y los demás titulares, se entrenó en forma diferenciada y se ilusiona con que en estos días evolucionará bien y podrá estar, salvo que el DT decida cuidarlo.
Entonces, si eso sucede, el lugar del ´8´ podría ser ocupado por Mario Bolatti o Javier Pastore, aunque hay otra chance que también navega por la cabeza de Maradona con insistencia: que entre Nicolás Burdisso y que Jonás Gutiérrez escale unos metros para jugar en la posición que mejor le sienta.
Mientras tanto, Heinze vive un gran momento. Cuenta cómo llegó al gol de cabeza: "Es como todo lo que pasa en el fútbol, a veces uno está en el lugar correcto. Vi venir el centro y no dudé en meter el frentazo´´, dijo el Gringo, que metió un testazo de novela justamente después de un centro de La Bruja.
El primer gol argentino en Sudáfrica fue cuando recién se habían jugado seis minutos de partido y no sólo trajo tranquilidad en el cotejo, sino que les permitirá a Maradona y sus muchachos, a mantener la calma hasta el jueves, cuando se enfrenten a Cores.
"Podemos irnos a dormir tranquilos y mirar el futuro con optimismo´´, señaló Heinze, antes de subirse al auto y llegar a Pretoria, dónde sus compañeros lo esperaban descansando. Tranquilos, obvio, gracias a él?