El historial de roces en las relaciones entre el técnico Dunga y la prensa de Brasil vivió un nuevo capítulo al anunciarse que la práctica de ayer se realizaba a puertas cerradas, al contrario de lo que se había informado previamente.
Los periodistas que siguen a la "seleçao" coincidieron en atribuir la sorpresiva decisión a una "represalia" de Dunga debido a que en Brasil se publicaron noticias acerca de un supuesto roce entre Julio Baptista y Daniel Alves en la práctica del pasado viernes.
El incidente habría ocurrido a raíz de una falta de Alves sobre Baptista, quien habría reaccionado en forma violenta.
"Es una payasada comentar que Baptista se peleó con Dani. En el fútbol es normal que una jugada sea más brusca que otra, pero nosotros vivimos en un ambiente de armonía muy grande. Ustedes deberían apoyarnos porque, si somos campeones, ustedes también serán campeones", afirmó Felipe Melo.
Este es el segundo roce entre Dunga y la prensa brasileña en pocos días. El pasado viernes, los dirigentes de Brasil desmintieron una noticia divulgada por el diario "Folha de Sao Paulo", según la cual Robinho recibió un "tirón de orejas" de Dunga por haber concedido una entrevista exclusiva a TV Globo el día libre del grupo.
Según el informe, Robinho incluso habría pedido disculpas a su compañeros por violar la norma que limita los contactos con la prensa a entrevistas diarias de dos jugadores elegidos por la comisión técnica.
"En ningún momento Dunga le llamó la atención a Robinho, como no es verdad que el jugador habría pedido disculpas a sus compañeros, lo que sería un hecho sin propósito y absurdo", afirmó la Confederación Brasileña de Fút-bol (CBF).