La selección de Chile llegó ayer al aeropuerto Kruger Mpumalanga de la ciudad sudafricana de Nelspruit para dar inicio a su sueño mundialista, que tiene como clave la recuperación del delantero y goleador Humberto Suazo.
Los jugadores y el técnico argentino Marcelo Bielsa fueron recibidos por unos 300 hinchas chilenos y locales que llegaron a teñir el terminal aéreo de rojo con banderas y lienzos de apoyo al equipo.
En completo hermetismo, la Roja devolvió los saludos a los fanáticos en medio del papeleo y la bienvenida oficial. Por disposición de FIFA, la comitiva chilena fue resguardada por 100 policías sudafricanos que se encargaron de llevar al equipo al ómnibus que lo trasladó al Resort Ingwenyama, ubicado a unos 30 kilómetros de la ciudad de Nelspruit.
Desde esa localidad, Suazo viajará más de cuatro horas a la ciudad de Pretoria para seguir el tratamiento en cámara hiperbárica que busca sanar el desgarro en el isquiotibial izquierdo que lo aqueja.
En la delegación dirigencial que viajó a Sudáfrica todavía no descartan la instalación de una cámara unipersonal dentro del complejo que recibirá a Chile para evitar fatigar al "Chupete".
El resto del equipo se entrenó ayer mismo, mientras Bielsa ya prepara el último choque de preparación, frente a Nueva Zelanda el 9 de junio, con jornadas dobles de entrenamiento que comenzarán hoy. Chile debutará en el Mundial el miércoles 16 de junio frente a Honduras por el Grupo H.