| Europa se quedó con el control del Mundial tras el adiós prematuro de Argentina y Brasil de una Copa que, por cuarta vez en su historia, tiene en semifinales sólo a representantes europeas. Alemania se permitió incluso ayer una broma. "Hace dos días ganamos el Mundial al derrotar a Argentina, y ahora podemos ser campeones de Europa", dijo Joachim Loew, número dos de Klinsmann. Por cuarta vez en 76 años, tras 1934, 1966 y 1982, el Mundial es sólo cosa de europeos a la hora de las semifinales. No valieron de nada los dos títulos y las dos finales de Argentina a lo largo de la historia. No pesó el deseo de Brasil de llegar al hexacampeonato aprovechando la ventaja de contar con un equipo plagado de estrellas. Suecia 58 sigue siendo, casi medio siglo después, el único ejemplo de un Mundial en el que un equipo sudamericano logró el trofeo jugando en Europa. Y el "empate" en el duelo de regiones y escuelas está garantizado, porque hasta 2002 Sudamérica acumulaba nueve títulos -cinco de Brasil, dos de Argentina y dos de Uruguay-, y Europa sumará ahora la misma cantidad, incorporando una estrella más a los tres títulos de Alemania e Italia y el ganado por Francia e Inglaterra. La pregunta es, en todo caso, si Portugal dará la sorpresa y ser campeón por primera vez. Por último, los goles escasearon en los juegos de cuartos de final, sólo seis, y en dos partidos debieran resolverse en la tanda de penales. El promedio de 1,5 goles por partido, muy inferior a los 2,52 de la primera fase y los 2,35 de los octavos de final. El promedio de goles de Alemania 2006 está ya en 2,30, demasiado cerca de los 2,21 de Italia 90. El mensaje para la semana que empieza está claro: goles, por favor. (DPA) |