El regreso de Zinedine Zidane, mañana ante España por octavos de final del Mundial, llevará al técnico francés Raymond Domenech a alinear un equi-po diferente a los anteriores. Zidane, menos inspirado, sigue siendo Zidane, y jugará en Alemania los últimos minutos de su campaña como jugador, y parece más que improbable que Domenech prescinda de él. Pero, la pregunta que flota en el aire es ¿cómo hará Francia, que jugó sin él ante Togo, para asimilar su regreso? "Por el momento, estoy haciendo mis proyecciones personales, y lo que va a pasar con España en cuanto a la organización del equipo, lo sabrán después del último entrenamiento", comentó Domenech, quien podrá contar con su defensa completa con el regreso de Eric Abidal. El técnico advirtió que "si jugamos sin solidez en la defensa, podemos ir sacando el billete de regreso a casa". Una frase que, añadida al hecho de que David Trezeguet, quien no aprovechó su oportunidad ante Togo, ya no insistirá en jugar con dos puntas. Un esquema posible (4-2-3-1), es el que los franceses utilizaron en sus dos primeros partidos con sendos empates. Un equipo posible sería con Barthez; Sagnol, Thuram, Gallas y Abidal; Vieira, Makelele, Ribéry, Zidane; Malouda y Henry. El esquema olvidado (4-3-1-2) fue el que utilizó Domenech en los partidos de preparación, en particular para respetar la voluntad de Zidane. Pero, fue abandonado en Alemania. En este caso, el equipo formaría con Barthez; Sagnol, Thuram, Gallas y Abidal; Vieira, Makelele, Malouda o Ribéry; Zidane; Trezeguet y Henry. Un esquema sorpresa (4-4-2), se considerado poco probable, porque obligaría a "ZZ" a volcarse sobre un lateral. El equipo sorpresa estaría integrado por Barthez; Sagnol, Thuram, Gallas y Abidal; Ribéry, Vieira, Makelele y Zidane; Trezeguet y Henry. |