Ucrania superó ayer a Túnez, por 1 a 0, en el último partido por el grupo H y clasificó para los octavos de final del Mundial. La victoria llegó con un dudoso penal ejecutado por el astro Andrei Shevchenko a los 70 minutos. Durante los primeros veinte minutos, el partido fue un fiasco. Ninguno podía llegar al área con pelota dominada y el partido fue de lo peor que se vio en el Mundial. Los ucranianos, a quie-nes les alcanzaba un empate para avanzar a octavos, sólo amenazaron con Andrei Shevchenko. A los 45, Boumnijel le desvió un soberbio disparo a Oleg Shelayev. I-gual, era muy poco para un partido en el que los dos equipos se jugaban el histórico pase a octavos. En el minuto adicional, el árbitro expulsó al tunecino Zied Jaziri por doble amonestación. Los arcos siguieron decorando una hermosa postal en el estadio Olímpico de Berlín en el segundo tiempo. Salvo un milagro, el cero estaba sellado. Pero Ucrania se encontró con un regalo, un premio demasiado grande. Shevchenko marcó de penal a los 70, dándole tranquilidad a su equipo y sepultando el sueño africano. |