El gol de Kaká fue la única diferencia que se marcó como para que haya un ganador en este partido. Brasil manejó la pelota, es cierto, pero también quedó demostrado que Croacia fue el más peligroso. Contando las situaciones de riesgo, los croatas tuvieron unas cuantas más, pero fallaron siempre en la definición. Lástima. Esperaba más de Brasil, aunque al ser el primer partido pueden argumentar que están entrando en ritmo. Croacia es un buen equipo, los jugadores saben lo que quieren y entienden cómo llegar al arco contrario. Otra sería la historia si hubiesen estado más finos en la definición. Pero también demostraron ser muy inocentes en varios aspectos, sobre todo cuando tuvieron la oportunidad de marcar, les sucedió en el gol de Kaká: le dieron todas las facilidades. |