Una alegre muchedumbre se concentró ayer al mediodía en la principal plaza del centro de Munich para demostrar su adoración al dios Fútbol, pocas horas antes del puntapié inicial del partido inaugural entre Alemania y Costa Rica.

"Ocho horas, un minuto y nueve segundos", rezaba la cuenta regresiva en una de las pantallas gigantes instaladas por la cadena de televisión pública ZDF.

Portando banderas alemanas y vistiendo camisetas de la selección, los aficionados locales animaban con sus cánticos desde temprano la Marienplatz.

Bajo un fuerte sol que no faltó a la cita, también destacaban los hinchas de las selecciones latinoamericanas y equipos de televisión del mundo entero, que registraban las imágenes.

Brasileños, mexicanos y ecuatorianos deambulaban por las calles. Entre ellos, el alemán Wolfgang Hubert, un barbudo barrigón, vestía una camiseta roja con la inscripción "Costa Rica" . Además, agitaba con la mano una bandera tricolor 'tica'. "A mí no me interesa el fútbol, pero con algunos amigos vamos a ver el partido por tevé en un Biergarten (cervecería al aire libre).