| Esta tarde Juampi Sorín lucirá la cinta de capitán del seleccionado, un privilegio que supieron disfrutar otros 13 jugadores a lo largo de la historia de los Mundiales y que Maradona llevó en tres de ellos. En el '30, el capitán fue Manuel Ferreira, reconocido por su buen juego y su conducta. Fue jugador de Estudiantes y saltó al seleccionado a fuerza de goles. Cuatro años más tarde, en Italia 1934, la cinta recayó en Alfredo Devicenzi, pero para la Argentina amateur fue debut y despedida. En Suecia 1958, Pedro Dellacha usó la cinta y luego fue considerado uno de los grandes zagueros de la historia de Racing: "Pedro del área", le dijeron. Martín Pando fue capitán de todos los partidos antes del debut en Chile '62, pero Juan Carlos Lorenzo lo dejó afuera. Ese día, a la cinta la usó Rubén Navarro, pero luego se la devolvió. En Inglaterra '66 el capitán fue el recordado Antonio Rattín, ese mismo que tras ser expulsado caminó por la alfombra roja de la reina británica. El "Mariscal" Roberto Perfumo usó la cinta en Alemania '74 y fue un indiscutido históricamente. Muchos fueron sus méritos, y más su talento: aún siendo marcador central, nunca lo expulsaron. Daniel Passarella, el único futbolista que integró los planteles del '78 y el '86, se puso la cinta en el Mundial de Argentina, la primera gran alegría para los argentinos. El káiser fue el caudillo de Menotti y vistió el brazalete de capitán en dos Copas. Genio y figura en México 1986, Maradona fue la insignia de aquel equipo que dio la segunda vuelta olímpica. Como capitán del grupo, fue la voz cantante, el corazón y el talento inacabado de varias selecciones, hasta que en el '94 vivió la peor pesadilla. En el 90 Diego lloró ante las cámaras tras perder la final contra Alemania, y cuatro años después le "cortaron las piernas". Ya en Francia 98, el brazalete fue para Simeone. En Corea-Japón iba a ser Roberto Ayala, pero se lesionó, y Bielsa le dio la cinta a la "Brujita" Verón y a Gabriel Batistuta. Hasta que Bielsa renunció como técnico del seleccionado, el capitán fue Ayala, elegido por votación por sus propios compañeros. Pero José Pekerman decidió modificar esa modalidad y designó a Sorín, uno de sus pollos. | 
