“En el Alto Valle también hay buena pesca. Muchos se van a la cordillera, pero acá hay lugares espectaculares”, dice el guía Sebastián Rivanera, de “Sendas Patagónicas”. Y describe tres recorridos muy interesantes.
• De Arroyito a Senillosa: “Nosotros decimos que el Limay inferior es un mini Limay medio por su sucesión de brazos e islas. Se pueden pescar truchas arco iris de buen porte y también llevarse una sorpresa con alguna trucha marrón muy interesante. Está bueno aprovechar esa geografía pasa pescar desde la balsa o de vadeo”.
• De Dique Compensador a Villa Manzano: “Es un tramo de aspecto similar al anterior, pero con una sucesión de correderas (cuando el agua toma más velocidad) propicia para obtener arco iris de entre 800 gramos y un kilo y medio. Las islas, los brazos menores y las correderas conforman un delta muy atractivo. Las arco iris están bien alimentadas y son peleadoras. Nosotros fomentamos la devolución, pero si un pescador quiere llevarse una, el reglamento lo permite. En este tramo, como en el de Arroyito, también hay percas y pejerreyes patagónicos. En esta zona podés alternar la pesca en profundidad con moscas streamers y ninfas con la de moscas secas con líneas de flote en los brazos más pequeños del río”.
• De Allen a Roca: “Aquí el río Negro es más profundo, ancho y caudaloso, con un paisaje más uniforme. Requiere de pesca en profundidad con moscas streamers y ninfas. Aquí se puede pescar arco iris de más de un kilo con moscas streamers que imitan al pejerrey patagónico. Si recorres  estos tramos en balsa como hacemos nosotros, la gran ventaja es que accedés a lugares inaccesibles si vas caminando o en embarcaciones a motor”.  “Sendas Patagónicas” organiza flotadas promocionales en estos y otros recorridos del Alto Valle.

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