El Centro de Formación Laboral Mamá Margarita es un eslabón educativo más de la obra Orespa, destinado a niños y adolescentes de entre 9 y 15 años, institucionalizados y que provienen de la comunidad, quienes se encuentran en situación de riesgo social.

El padre Rondini anhelaba encontrar la mejor forma de colaborar en la educación de los niños con instituciones cuyos programas no sólo instruyeran sino que además formaran personas capaces de recuperar su autoestima, su capacidad de dar y recibir, la formación de su dignidad como ser humano, sus deberes y sus obligaciones. El centro abrió sus puertas el 3 de abril del 2000.

Alicia Quintans de Cassani, supo, con la colaboración y asesoría de la profesora Marcela Baylac, interpretar la idea del padre cuando pensó en el centro. El resultado de ese trabajo les permitió alcanzar los logros positivos en su organización dando el impulso necesario para alcanzar el objetivo, un lugar que da a los chicos herramientas que les permitan en el futuro poder valerse por sí mismos. Lleva el nombre Mamá Margarita por la presencia especial de esta madre en la labor educativa de su hijo Don Bosco, fundador de la obra Salesiana.

La metodología de trabajo es aprender haciendo, ya que los alumnos todo lo realizan con sus manos. A través de esto se busca una formación integral, creando hábitos para la cultura del trabajo, una buena utilización del tiempo libre, incorporando valores y aportando así al desarrollo armónico de la personalidad.

El centro que funciona en contraturno escolar brinda talleres de manualidades, economía doméstica, costura, panadería, carpintería, trabajos por la naturaleza y apoyo escolar. Tiene dos extensiones, uno en barrio El Sauce y otro en El Trabajo, y concurren 280 niños que participan en talleres, jornadas y charlas.

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