Luego de que la Comisión Organizadora de la Fiesta de la Pera diera un paso al costado por diferentes motivos que fueron expuestos públicamente, la Municipalidad de Allen decidió hacerse cargo de la organización junto al Sindicato de Camioneros. Tras dialogar con la Cámara de Productores y consensuar la realización del evento, se creó una comisión municipal para poner en marcha el evento. Todo el movimiento organizacional fue rápido ya que hubo muy pocos meses para montar el andamiaje que requiere.
-¿Es un gran desafío para el municipio ser uno de los pilares de la concreción de la XII Fiesta Nacional de la Pera?
-Yo lo tomo como una parte más de todos los trabajos que lleva adelante la Municipalidad. Nosotros siempre tuvimos una colaboración muy directa con la organización del evento en cuanto a hacer gestiones para apoyar a la Fiesta Nacional de la Pera. Este año se dio de una forma distinta, pero siempre estamos con la misma dinámica de trabajo.
Puse mucho el acento sobre el vínculo que tenemos con los productores pequeños y medianos. Y decidimos lanzarnos a una fiesta con acceso libre y gratuito.
-¿Qué se priorizó en el momento en que tambaleó la fiesta cuando la Comisión Organizadora dio un paso al costado?
-Antes que nada quiero remarcar que no existe un enfrentamiento entre la Comisión Organizadora y el intendente.
Yo tengo que agradecer que la Comisión siempre me tuvo mucha confianza para que hiciera gestiones como lo hice en el 2008 y 2009. Creo que fui el primer intendente que tuvo muestras concretas de aportes con respecto a la fiesta. Ellos la llevaron hacia arriba y ahora me toca mantenerla. Y se priorizó su realización porque hay una ley que responsabiliza al municipio y políticamente es lo que tiene que darme la fortaleza para llevarla adelante, sino hasta corría el riesgo de que el mismo Soria (en referencia al intendente de Roca) me anunciara la Fiesta de la Manzana y de la Pera.
En segundo término también hay que hacer ver el vínculo que tenemos con la Cámara de Productores. Yo siempre trato de hacer un paralelismo entre lo que es la Fiesta de la Pera, la idiosincrasia del lugar y el perfil netamente productor que tiene Allen.
-¿Qué desea para la fiesta y qué tendrá el evento como novedad?
-Que se sienta la identidad de Allen, que tratemos de aunarnos entre todos. Por eso agradezco la cantidad de colaboradores, tanto a las instituciones como a las personas, que vinieron a ofrecerse para trabajar. Y yo creo que al hacerla con más apertura se logra otro tipo de incidencia en relación a que se puede mostrar la problemática que tenemos con los pequeños y medianos productores. La expectativa que nosotros tenemos -como hemos logrado el acompañamiento para superar esta contingencia- es que podamos participar y poner el énfasis sobre la coherencia que debemos tener alrededor del evento, que se realiza teniendo en cuenta la identidad de un pueblo y dentro de esa identidad el eje es la producción, de la que nos nutrimos todos.
-¿Qué presupuesto estimativo tiene la organización de la fiesta?
-En los números musicales andamos cerca de los 200 mil pesos, sin contar alojamiento, traslados, etc. Tenemos auspicios que se hacen cargo de algunos artistas, como sucede en el caso del Chiqui Pereyra con la empresa Saturno Hogar. Yo creo que el presupuesto de máxima es de 400 mil pesos. Buscamos aportes para aliviar los gastos que va a tener la Municipalidad.
-¿Seguirá acompañando a los productores?
-Sí. En su momento trabajamos con un proyecto agroexportador y todavía buscamos qué variantes podemos hallar. Recurrí a Guillermo Moreno para ver cómo colocar 70 camiones de carga térmica de Allen. Al final terminamos enviando 28. Los productores no cobraron en 60 días pero lo hicieron en 75 días. Una gran parte de la fruta fue a la cadena del hipermercado Carrefour. Ahora todos descubren a Moreno como una herramienta importante para la problemática local y Allen estuvo trabajando con Moreno en marzo del año pasado.