Recuerdo que fue un festejo importante y que había mucha expectativa, porque la de 1966 fue la primera edición de la Fiesta con carácter nacional y con Roca como sede. Tuvimos algunos inconvenientes, porque hubo que suspenderla por una inundación; en aquellos tiempos la ciudad se llenaba de agua con las grandes lluvias.

Yo tenía 15 años y empecé representando a Roca por el Club del Progreso. Cursaba el quinto año en el María Auxiliadora y fui a hablar con la monja directora para que les permitiera ver el desfile de carrozas a las pupilas. Ellas también hacían presión porque querían verme. Recuerdo que cuando pasé estaban todas las chicas y me dio mucha alegría verlas. El palco estaba en la avenida Roca, entre las plazas. Y cuando dijeron que gané tuve una lindísima sensación con ese aplauso impresionante, ese sonido potente.

Después empecé a viajar para representar a la región en otras fiestas, como la de la Vendimia. Es que al menos hay dos grandes tipos de fiestas. Unas de un carácter comercial y otras que celebran el trabajo y, en un punto, de lo que vive parte de la comunidad. Es muy lindo ser la imagen de un festejo de estas características.

Cuando recorría el país me pedían que describiera el lugar de donde venía y yo les contaba de los galpones, la cosecha, las fogatas para combatir las heladas, de cómo un desierto se había convertido en vergel con esfuerzo y sacrificio.

Por otro lado, ser Reina de la Manzana a los 15 años me dio seguridad. Porque vos nunca sabés cómo vas a hablar en público, cómo te vas a desempeñar cuando hay muchas miradas, si te va a dar pánico... ¿Qué música escuchábamos? Palito Ortega, Sandro... ¡Y había llegado el primer disco de Los Beatles! Era toda una novedad para nosotros. Escuchábamos las noticias por la radio, los diarios de la capital llegaban con varios días de atraso y las revistas eran nuestra fuente para saber qué se usaba. Los chicos que volvían de Buenos Aires para las vacaciones traían las modas y las tendencias. De alguna forma siempre nos enterábamos de todo.

Después me fui a estudiar periodismo a La Plata. Los chicos del interior almorzábamos todos juntos en un enorme comedor. Éramos cientos... Más tarde supe que cuando yo pasaba decían: "Ahí va la Reina de la Manzana".

¿Qué cambió en el concepto de belleza? Las modas, los peinados, los maquillajes. Pasaron 40 años... Creo que nosotros no teníamos conciencia del cuerpo de la manera que se tiene hoy. No había cirugías estéticas ni operaciones. Ahora hay más posibilidades de todo tipo y una exacerbación de lo físico. La belleza es un atributo que Dios te da, pero no podés quedarte en eso sin evolucionar en otros niveles.

(*) Primera Reina de la Fiesta Nacional de la Manzana, en 1966. Ex modelo. Conductora de radio y tevé.