El desarrollo y crecimiento de la producción orgánica en los últimos años y el requerimiento de los mercados de este tipo de frutas ha llevado a empresas de la región a replantearse la necesidad de mejorar sus esquemas de trabajo para adaptarse a las nuevas exigencias.

Así es como nació el proyecto de una firma reginense para el desarrollo de un implemento destinado a galpones de empaque para el trabajo de la fruta orgánica.

Puntualmente se trata de un brazo robótico para el desapilado, volcado y apilado de bins con este tipo de frutas, reduciendo de esta forma la posibilidad de pérdidas de calidad por la utilización de otro tipo de herramientas que provocan golpes a peras y manzanas.

Pero a estas tareas se suma además que el brazo robótico permitirá el pesado de cada bins y su tara posterior para mejorar los esquemas de trabajo.

El implemento que ya está registrado y en vía de patentamiento, fue adquirido recientemente por una planta de empaque de fruta orgánica ubicada en Chichinales.

El proyecto ha sido desarrollado por la firma Ingeniería Valgoi, con sede en Regina, que hará la presentación del brazo robótico durante esta edición de la Feria Nacional del Comahue que se desarrolla en estos días.

Luis Valgoi, uno de los titulares de la empresa reginense, explicó que la idea nació a partir de distintos automatismos y automatizaciones que se están haciendo "y la necesidad que tiene la fruticultura de tener un desapilador, volquete y apilador sobre la línea de producción y el principal problema que comenzó a tener la fruticultura en los últimos años con la producción orgánica de no poder hacer flotarla con la utilización de sales en el agua".

Precisamente la herramienta diseñada cuenta con dos cintas transportadoras de ingreso y salida de los bins, con un brazo que en forma suave los desapila de a uno, los ingresa a las piletas con las cintas transportadora sumergida en agua, para finalmente volver a apilarlos vacíos a la salida de la máquina.

"La principal ventaja es que se carga de tres a cuatro bines en el ingreso, tiene una muy poca utilización de espacio y una gran capacidad de carga porque utiliza microcontroladores. Es un brazo de montacarga que cuenta con todas las posibilidades de levantamiento, giro y volcado y desplaza la mano humana en este trabajo, y se puede modificar su velocidad de trabajo. A máxima velocidad puede llegar a un promedio de 70 bins por hora", agregó Valgoi.

"El inicio de este proyecto es debidamente a una empresa empacadora que trabaja con producción orgánica y que hoy ve estos inconvenientes que se le presentan en cuanto al manejo de este tipo de fruta, y que ya demando algunas modificaciones en su esquema de producción", comentó por otra parte.

Si bien el proyecto fue ideado y desarrollado para el empaque de fruta orgánica, se planificó su utilización también en otras líneas de producción, tanto la tradicional de peras y manzanas, como el cítrico y el tomate "teniendo en cuenta que hace un manejo muy delicado, que evita golpes y daños".

Finalmente, Luis Valgoi indicó a este diario que "si bien cuando se habla de este tipo de herramientas se piensa en costos muy altos, hoy podemos decir que tendrá un valor muy inferior a lo que se puede conseguir en el mercado. Actualmente existen en el mercado productos similares con un costo de 90.000 dólares. En nuestro caso pensamos en un valor muy inferior; es decir que con una herramienta base de esta máquina, los pequeños y medianos empacadores tendrán posibilidad de acceso y posteriormente ir incluyendo otros complementos que la hacen una herramienta muy versátil".