Que una cooperativa, la de Comodoro Rivadavia, la que inició en l994 en nuestro país la experiencia de generar energía limpia a través del viento. Ya cuenta con 26 molinos en su parque eólico y beneficia a casi 20.000 hogares.

Con el tiempo, otras cooperativas de electricidad repitieron esa experiencia y apuestan al crecimiento. De hecho, hay un proyecto oficial que pretende que para el 2025 la generación eólica cubra una demanda de energía equivalente al consumo de cerca de un millón de hogares a lo largo de un año a través de un fuerte impulso estatal.

¿Cómo? A casi dos años de que se promulgara la ley de Energías Renovables, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner reglamentó la ley que establece los incentivos fiscales y las remunera- ciones diferenciales que tendrán las inversiones destinadas a la fabricación de equipos generadores y la producción de energía con recursos renovables, como viento, agua o residuos. Además se puso en marcha el programa Generación Eléctrica a partir de Fuentes Renovables. También se anunció la licitación para la provisión de 1.000 MW de energía de fuentes renovables con contratos de compra que tendrán una duración de 15 años y que está a cargo de la estatal Enarsa. La licitación establece que 500 MW se destinarán a eólica.

¿Y qué piensan de esto y del presente del sector quienes trabajan con una energía que es segura, renovable, limpia, no produce emisiones a la atmósfera, genera puestos de trabajo y permite cambiar la calidad de vida de las personas? La opinión del titular de la Federación que agrupa a estas organizaciones y referentes de las distintas cooperativas:

Desde la Federación Argentina de Cooperativas de Electricidad (FACE) se fomenta el desarrollo de emprendimientos eólicos. Su presidente, Marcelo Gallo, explica el porqué: "Esto nace como consecuencia de nuestro proyecto de Generación Eléctrica de Cooperativas Integradas (GECI), que tiene por objeto desarrollar centrales de generación de energía eléctrica que posibiliten el abastecimiento de los importantes incrementos de demanda de energía que experimentan las cooperativas, con la utilización preferencial de recursos energéticos regionales, renovables y no contaminantes".

Además de los 26 molinos de Comodoro Rivadavia -el emprendimiento eólico más grande de Sudamérica-, Chubut cuenta con uno más en Rada Tilly. También hay generadores en Punta Alta, Claromecó, Darregueira, Pehuen Co, Buratovich y Tandil (Buenos Aires), Cutral Co (Neuquén) y General Acha (La Pampa).

La gente de la cooperativa de Zapala, junto al INTI, el INTA y el Invap, puso en marcha en febrero el primer molino de energía eólica para extracción de agua con destino al riego de áreas productivas en la zona próxima al cerro Michacheo. En los próximos meses prevén la instalación de nuevas unidades en lotes pertenecientes a los asociados a la cooperativa. El objetivo final del emprendimiento tecnológico es poner bajo riego una superficie estimada de unas 350 hectáreas. La financiación estará a cargo del gobierno nacional que invertirá alrededor de 2 millones de pesos.

Conocidas estas iniciativas, Gallo considera que este tipo de energía "resulta competitiva en aquellas zonas de la Argentina que poseen ciertas velocidades de viento y determinados valores de permanencia. Se ha confeccionado un mapa del recurso eólico a nivel nacional que puede servir como base para reconocer el potencial eólico de cada región. Las cooperativas que prestan servicios en zonas donde el recurso eólico es relevante están en condiciones de plantear el desarrollo de una granja eólica. Son precisamente las cooperativas de electricidad las que han instalado la totalidad de los molinos que operan en la Argentina y son las entidades que acumulan la mayor experiencia operativa".

-¿Es verdad que la energía eólica es costosa para los usuarios?

-Debemos hablar de eficacia energética, sobriedad y energías renovables. La mayor acción es la disminución del consumo; hay que sensibilizar a la gente. Aunque es caro producir energías alternativas, hay que instalarlas. Debemos reemplazar el petróleo por la inteligencia, porque es mucho más fácil lograr energía alternativa que cambiar el precio del petróleo. El ciudadano se debe convertir en un actor de la energía y no un espectador, como somos hasta ahora. Debemos generar debates, determinar la trazabilidad del kilovatio hora, de dónde viene, con qué se genera.

Especial para la Red de Diarios en Periodismo Social

Raúl Mingo, responsable del proyecto del INTI

-¿Por qué decidieron comenzar con este tipo de proyecto?
-La decisión se tomó porque es un tema recurrente. Emprendedores lo venían encarando y desde la órbita estatal no se hacía nada en forma sistemática. En ese sentido, pensamos que el INTI es una de las instituciones estatales con mayor capacidad para enfrentar proyectos de estas características. Pero era un tema nuevo para nosotros.
-¿En qué consiste el proyecto que están desarrollando en el INTI?
-Primero, involucramos a todas las áreas del INTI. Como idea se eligió un molino de eje vertical, considerando que en estos  momentos hay muy poca gente trabajando esta tecnología, ya que abundan los molinos de eje horizontal. Y además, creemos que tiene algunas ventajas con respecto al horizontal. Tenemos en claro que una de las crisis que ya se están viendo es la alimentaria. La producción de alimentos está comprometida, lo que implica incorporar más áreas de cultivo. La Argentina tiene zonas que, habiendo recursos hídricos cerca, presenta dificultades para el riego. El molino que diseñamos, de 2 kilovatios (kW), podría llegar a beneficiar con riego a dos o tres hectáreas.
-¿Lo van a probar en la costa bonaerense?
-Cerca de Mar del Plata, y la idea es probar cómo reacciona el molino para riego.
-¿Qué desventajas tiene la energía eólica?
-La desventaja es que no puede abastecer a todo el sistema energético, porque no todas las regiones tienen vientos propicios. Generalmente se da que, donde hay viento, hay poca producción o poca población. Es un recurso limitado que resuelve parte del problema.
-¿Están en contacto con provincias?
-La idea es, inmediatamente superada la etapa de prueba que iniciamos este mes y que se extenderá por un año, ver en qué lugares es replicable esta tecnología. 

Una fuente alternativa

Los molinos de viento para extraer agua son parte del paisaje del extenso territorio nacional. Como herencia de este viejo sistema energético de extracción de agua, y gracias a las nuevas tecnologías, en el mundo se utiliza la energía del viento o eólica, una de las fuentes alternativas y limpias, frente a los combustibles no renovables como el carbón, el petróleo y el gas natural. Las aplicaciones más comunes son el transporte y el bombeo de agua, a las que se ha sumado la producción de electricidad mediante generadores.