El contexto de estabilidad monetaria que signó los años de convertibilidad ya no está y sin embargo las grandes reglas del mercado eléctrico dictadas al amparo de aquel modelo se mantienen más o menos indemnes. "Hoy estamos lejos" de aquella realidad y por lo tanto los preceptos de los '90 "quedaron fuera de moda", dijo en esta entrevista realizada a través del teléfono el presidente de la Cooperativa de Electricidad Bariloche, Omar Goye.

Reveló que durante el invierno pasado la ciudad dependió durante casi un mes de las dos usinas que constituyen la reserva fría de la central para sostener el servicio en los niveles acostumbrados. Urge no sólo la nueva línea sino también el reemplazo del equipo de potencia de su estación transformadora.

Goye consideró que los usuarios de la ciudad están en condiciones de hacer frente al pedido de aumento del 45%.

-¿Qué porcentaje de aumento está solicitando en promedio la cooperativa en esta segunda revisión tarifaria?

-El 45,2%.

-Sabe que es una cifra alta, ¿no?

-¿Alta en relación con qué?

-Por ejemplo, en relación con el 10 al 30% que acaba de disponer el gobierno nacional para la distribución de gas.

-Si lo comparamos con el porcentaje solicitado el año pasado por Edersa, que era en promedio del 85%, consideramos que es muy razonable. Ocurre que este modelo, el del marco regulatorio nacional y provincial, está fuera de moda, por llamarlo de alguna manera, por cuanto determina tarifas en un contexto de estabilidad monetaria, fijado por la ley de convertibilidad... y lejos estamos hoy de ese modelo.

-¿Cuáles son los costos que más se dispararon en estos años?

-Obviamente los laborales; después, los de materiales: desde la salida de la convertibilidad los costos de prestación del servicio de electricidad son altos debido a que los materiales son el cobre, el acero... todos commodities que cambiaron sus precios en dólares. También tiene incidencia el precio del petróleo, puesto que es la base de la cobertura de los conductores eléctricos.

-Estos marcos regulatorios dicen que la tarifa debe cubrir los costos, pero también debe poder ser pagada por los usuarios. ¿El aumento propuesto por ustedes sería para hogares, comercios e industrias por igual?

-Las categorías tarifarias deben ser respetadas so pena de no ser considerada por el ente regulador la propuesta en su conjunto y resolver de oficio un cuadro tarifario.

-En la última revisión tarifaria de Edersa, el ente regulador quebró esa regla y modificó las estructuras tarifarias.

-Dentro de los parámetros legales, eso fue lo que hizo el ente regulador. El ente da el marco de referencia para hacer la propuesta tarifaria y pide que sea en el marco de la ley vigente. Nosotros además le hicimos una propuesta diferencial: frente a un proceso inflacionario, la revisión de determinados costos que condicionan la ecuación, incluso con una tasa de rentabilidad inferior a la que habíamos propuesto. Esto tiene que ver con una conciencia plena de que el modelo es regresivo, que cinco años son una eternidad para poder prestar los

servicios en la calidad que requieren los contratos de concesión. Hemos dicho que, si bien conocemos las limitaciones de orden legal, sabemos que el ente está haciendo una reevaluación de esta ley, así como hay legisladores que han presentado proyectos de reforma. Nuestra propuesta la hacemos tomando en cuenta una cuestión similar que ya existe en la provincia de Río Negro; no inventamos nada: estamos proponiendo que se haga lo mismo que hace el otro regulador, que es el Departamento Provincial de Aguas (DPA).

-Pero en ese caso el regulador y el regulado, que es Aguas Rionegrinas, son manejados por el mismo gobierno.

-No es tan así. Nosotros tenemos el servicio de saneamiento y hay un montón de cooperativas que prestan el servicio de agua.

-¿Y con el DPA tienen un mejor reconocimiento de sus costos?

-No sé si es mejor, pero por lo menos es un sistema más ágil.

-El ente regulador eléctrico hizo revisiones extraordinarias para analizar nuevos costos laborales, lo que es novedoso.

-Hay que rescatar que el ente reconoció el orden público que tienen las normas laborales y los convenios colectivos de trabajo; es beneficioso para toda la so

ciedad porque reconoce costos que sí o sí hay que pagar.

-Volviendo a la tarifa que pueden pagar los usuarios, ¿usted cree que la sociedad de Bariloche está en condiciones de afrontar un aumento como el que ustedes están reclamando?

-Sí, porque nosotros tenemos un mercado en el que el 93% es usuario residencial (R1 y R2). Claramente hicimos una exposición mostrando la incidencia de lo que sería el costo incremental mensual del aumento propuesto en cada una de las categorías, que arranca en 90 centavos para un consumo de 44 kilovatios hora (kWh) mensuales hasta el máximo,

que son 36 pesos en un usuario que consume entre 500 y 600 kWh por mes, que puede considerarse un consumo residencial alto que por lo general denota, a su vez, una mayor capacidad contributiva de quien lo consume.

-¿Podría identificar los costos que le significa a la cooperativa mantener la reserva fría?

-Considerando la característica de Bariloche, que es punta de línea y que está abastecida por un solo tendido, que ya tiene síntomas de saturación, para nosotros mantener la reserva fría con las centrales Juan Pechon e Ingeniero Casadío es un costo neto de abastecimiento, valuado en función de las veces que debió entrar en generación y lo hemos justificado con datos estadísticos, por ejemplo, mostrando cuántas veces en el quinquenio que pasó tuvimos que hacer uso de esa reserva por cortes de la línea Alipiba, tanto en mano de obra como en mantenimiento de máquinas, en aproximadamente 1.170.000 pesos anuales.

-¿Eso sólo para mantenerlo o con el combustible?

-No incluye el costo de combustible. Durante el presente invierno tuvimos que generar durante 29 días con parte de la reserva, desde mitad de julio a mitad de agosto, en períodos de entre de dos a cuatro horas diarias.

-¿De qué potencia son?

-Las dos usinas tienen una potencia instalada de 16 megavatios (MW) y la ciudad demanda un total de entre 44 y 47 MW, dependiendo de la demanda pico.

-¿Qué pasó con la necesidad de contar con un nuevo transformador de potencia?

-La provincia llamó a licitación y adjudicó en agosto pasado con un plazo de 210 días para la provisión y la cooperativa está gestionando en la Secretaría de Energía de la Nación una prefinanciación para los costos de instalación, que fueron fijados a cargo de la cooperativa por el ENRE. Y creemos que para fin de junio del 2009 este transformador tendría que estar instalado, pero siempre tenemos dudas sobre la capacidad de la línea Alipiba (Alicura-Pilcaniyeu-Bariloche), que desde el 2006 hasta ahora presentó claros síntomas de saturación.

-En este caso también se da un problema irresuelto de las reformas de los '90: ¿quién financia una nueva línea?

-Claro, como si el mercado tuviera una varita mágica especial que solucionara las cosas por sí sola, que los problemas son de la gente y eso significara que lo tienen que pagar los que demandan esto. Decimos que estamos de acuerdo con que una parte de esta ampliación la pague Bariloche, pero también que es un asunto de la definición del marco eléctrico provincial. Esto ha sido entendido porque el gobierno de Río Negro está avanzando con el del Neuquén en la evaluación de lo que sería una nueva traza, para ver luego los costos asociados que esto tenga.

-Se ve que está avanzado porque Neuquén necesita completar la interconexión de su zona sur.

-Seguro, al tomar esto como el problema regional que realmente es, la carga de esta inversión se reparte más proporcionalmente, entre todos los actores.

-¿Cómo es la experiencia de comprar directamente la energía en el mercado mayorista?

-Nos reconocieron como agentes del mercado eléctrico mayorista en febrero del 2006. En la primera revisión tarifaria no teníamos este carácter y el reconocimiento del costo de abastecimiento era el menor entre la tarifa que nos cobraba Edersa y la del mercado mayorista. Entonces había meses en los que no se podía trasladar todo el costo a la tarifa. Ahora a Edersa sólo le estamos pagando el peaje de la línea.

-¿Eso está regulado por el ente nacional?

-No, eso está regulado por un contrato preexistente entre la provincia de Río Negro y la Cooperativa de Bariloche y cuando se privatizó ERSA se lo incorporó. Vence en el 2013. (AN)