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Domingo 30 de Diciembre de 2007
 
 
 
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  El país enfrentará otro año signado por la crisis energética
Neuquén cierra el 2007 con la producción de crudo en caída. Río Negro no pudo mantener los niveles de crecimiento.
 
 

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La crisis que signó la economía argentina hasta hace unos años parece haberse consolidado durante este 2007 en el mercado energético nacional sin muchos indicios de que vaya a disiparse en lo inmediato. Tal vez el 2008 sea el año de la recuperación pero, por ahora, no hay indicadores positivos, a pesar de los esfuerzos del nuevo gobierno nacional por tomar medidas que bajen la demanda este verano.
Para Neuquén el año no puede cerrar peor: el petróleo y el gas no sólo caen en su producción sino que además no paran de crecer en sus cotizaciones internacionales, sin que el Estado pueda siquiera mantener la porción de la renta de que disfrutaba hasta hace unos años.
Río Negro, en cambio, hizo grandes esfuerzos para fomentar la exploración y, si bien hasta hace unos meses los resultados comenzaban a ser positivos, el balance del 2007 en relación con el 2006 no es tan espectacular. De todos modos, la actividad no retrocedió en la provincia y el gobierno sembró para cosechar en el futuro.
Hace un año y medio que el petróleo de la cuenca Neuquina, el más liviano del mercado argentino, no se exporta: el 100% va a las refinerías ubicadas en la Argentina.
Hasta el mes pasado, a las petroleras integradas (tienen producción, procesamiento y comercialización) les convenía exportar productos elaborados, como naftas y lubricantes, porque la alícuota de las retenciones era mínima, pero con las nuevas reglas de juego, dispuestas a mediados de noviembre, los derivados tienen cargas tributarias similares al crudo.
Entre enero y setiembre (último dato disponible) de este año, la cotización internacional creció hasta acercarse a los 100 dólares por barril. Pero en Neuquén y Río Negro el precio promedio de venta del barril de 159 litros de petróleo fue de sólo 45,7 dólares. Los estados de ambas provincias se quedaron con una renta equivalente a menos del 12% de ese valor, es decir, alrededor de cinco dólares.
Neuquén registraba en el noveno mes del año una producción acumulada de petróleo que significaba una caída del 2,66% respecto del mismo período del 2006.
En un porcentaje similar aumentó la producción de crudo en la provincia de Río Negro en el período enero-setiembre de este año en comparación con los mismos meses del año anterior. Fue un 2,5% superior.
Neuquén ya no lidera la producción de petróleo en el país porque Chubut le quitó el primer lugar en el ranking provincial y Santa Cruz viene peleando el segundo puesto.
Lo de Río Negro fue siempre más modesto, aunque tenga las condiciones dadas para crecer.
En gas Neuquén es imbatible. Puede decirse que su producción sostiene la matriz energética del país. Por eso es tan grave que el 2007 marque una nueva caída en la extracción de este combustible en la provincia.
Siempre según los datos de la Secretaría de Energía de la Nación, este año hubo un 0,69% menos de gas neuquino.
Por otra parte, datos de la cartera de Energía pero de Neuquén muestran que desde abril del año pasado el 100% del gas que sale de yacimientos ubicados en la provincia va al mercado interno, lo que ni siquiera permite que el estado neuquino se quede con una parte de la renta de lo que se exporta, a precios más altos pero en cada vez menos volumen, a Chile.
No es el único dato preocupante: el principal yacimiento de gas del país, Loma de la Lata, produce también menos: los 8.800 millones de metros cúbicos extraídos allí entre enero y setiembre del 2006 pasaron a ser 8.338 millones en los mismos nueve meses de este año, lo que marca una caída del 5,3% en esta área operada por YPF.
Es cierto que en el verano baja la demanda residencial de gas a sus mínimos y que eso permite redirigir la oferta hacia las centrales térmicas, porque lo que en verano hace falta en Argentina es electricidad. Pero hasta mediados del año que viene el parque generador a gas es acotado (en el 2008 comenzará a funcionar el ciclo abierto de las dos usinas que se construyen por impulso estatal y aporte privado) y la demanda va en aumento.
(AN)

El peor pronóstico para los ríos

La nota sobresaliente del extenso pronóstico de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) es la persistencia de la sequía.
Tal como anticipó “Río Negro” en noviembre, los técnicos del organismo ven que en los valles los ríos seguirán bajos por lo menos hasta mediados del otoño y no habrá aportes extraordinarios al sistema eléctrico nacional desde las centrales hidráulicas.
Es difícil anticipar cómo será la evolución de los embalses, especialmente porque se trata de una variable que depende mucho del despacho eléctrico (no de lo que baje de las montañas, que será poco y nada).
La experiencia de años anteriores indica que, cuando hay agua suficiente en los embalses, por más que las perspectivas indiquen que no habrá recursos para reponer, la Secretaría de Energía se apura a utilizar toda la potencia posible en las turbinas de las hidroeléctricas de los ríos Limay y Neuquén.
El reporte de noviembre, que es el último que emitió la AIC, muestra que al 30 de ese mes es casi nula la presencia de nieve en los puntos más altos de las montañas y las precipitaciones registradas se colocan muy por debajo de la media histórica, aunque en los principales lagos del sur de Neuquén los niveles son cercanos al promedio.
“Se prevén precipitaciones del orden de las normales a por debajo de ellas”, se lee en el reporte de la AIC.
“Lo que precipite en el principio del verano, por su baja incidencia relativa dentro del período hidrológico, no hace prever un cambio en las condiciones de baja hidraulicidad que presentan actualmente los entrantes a los embalses”, añadió el organismo.
“Las perspectivas aludidas –continúa– se pueden resumir en un escenario de persistencia del déficit hídrico, con condiciones de mayor severidad para la cuenca del río Neuquén”.
Una operación esperable de las hidroeléctricas del río Limay, en función de la cantidad de agua que se acumuló en Piedra del Águila y de la bajante del embalse de El Chocón, sería incrementar la generación desde las presas ubicadas en el tramo superior del río en cuanto el calor haga crecer la demanda en la zona central del país.

 

   
   
 
 
 
Diario Río Negro.
Provincias de Río Negro y Neuquén, Patagonia, Argentina. Es una publicación de Editorial Rio Negro SA.
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