"El precio del barril de petróleo está todavía lejos de llegar a su techo; creíamos que lo había hecho cuando llegó a los 50 o a los 60, pero está lejos de alcanzar su valor máximo".
Marcelo Martínez Mosquera es experto en explotación hidrocarburífera, asesor del grupo Techint y ex director de la petrolera Tecpetrol.
El ejecutivo es también una máquina a la hora de disparar datos, pintar situaciones y redondear conclusiones.
Mosquera brindó una conferencia sin tonos bajos durante el Foro Internacional de Energía que se realizó en paralelo a la muestra "Argentina Oil & Gas 2007" que se realizó en el centro de exposiciones La Rural de la ciudad de Buenos Aires en octubre pasado, con gran afluencia de público.
Por esos días el precio del barril de crudo llegaba a los 90 dólares y en el horizonte inmediato estaban los 100 que pronosticaba Martínez Mosquera.
Así las cosas, no extrañó para nada que el auditorio lo premiara con aplausos al cierre de una exposición en la que entre otras cosas dio por sentado que hoy por hoy y en el futuro cercano no hay ningún tipo de energía que pueda reemplazar los combustibles fósiles.
Martínez Mosquera fue apocalíptico al momento de graficar el futuro de las explotaciones, que "no alcanzan ni van a alcanzar hasta que alguien o algunos dejen o modifiquen sus hábitos. En el '82, los chinos corrían a sacarse fotos cuando veían un automóvil. Hoy China tiene la misma red vial que Estados Unidos y la India otro tanto... ¿qué vamos a hacer, decirles 'Bueno, muchachos, todo bien pero los autos no los
pueden usar porque el combustible no alcanza?'", se interrogó Martínez Mosquera, quien describió cómo lentamente se produce la declinación en las reservas del recurso.
En esa línea, con gráficos en una doble pantalla, apuntó a los últimos datos de producción de la Cuenca Neuquina: "La cantidad de pozos es buena pero la producción está en baja", dijo Martínez Mosquera.
Este especialista trabajó en los últimos dos años en la elaboración de un informe sobre el futuro energético del planeta. Es ese trabajo el que terminó de convencerlo: a pesar de las inversiones y de los planes exploratorios el petróleo no alcanzará y los combustibles alternativos son de mala calidad, además de escasos.
COMPETENCIA
"El único combustible líquido que puede competir mano a mano con el petróleo es el bioetanol de Brasil, con la caña de azúcar de Brasil y con los rindes que se consiguen en Brasil", fue elocuente en su afirmación.
Con respecto a las posibilidades del resto de los biocombustibles, Martínez Mosquera dijo que si tomaran absolutamente todas las oleaginosas que se producen en el mundo sólo se podría satisfacer el 7% de la demanda internacional. Es más, aun en la hipótesis de que todo el maíz y el azúcar fueran utilizados para combustible "estaríamos hablando de un imposible, pues hablaríamos de muerte de gente y sólo llegaríamos a cubrir un 20% de la demanda".
En diálogo con "Río Negro", Martínez Mosquera negó ser un pesimista y afirmó que todas sus afirmaciones están documentadas en el trabajo que en principio fue un memo interno de su compañía y que luego se transformó en un informe con forma de libro.
"Lo pasé a PDF (el formato de Acrobat Reader, un programa de computación)
porque todo el mundo me lo pedía e incluso me dicen que lo transforme en libro pero no, no lo hago, y al que lo quiera se lo mando por mail", sostuvo el ejecutivo.
Una a una, Martínez Mosquera fue desmoronando las alternativas que se barajan alrededor de los yacimientos considerados más prometedores. Así, argumentó contra La Faja de Venezuela y el de Kashagan en el mar Caspio.
Sobre La Faja enumeró las complicaciones para abordar el escenario selvático, las distancias, el costo para movilizar los equipos y la mala calidad del combustible que, explicó, para poder ser utilizado debería recibir un doble refinado.
Después se encargó Kashagan que, contra las previsiones iniciales, todavía está muy lejos de ser puesto en producción: "Es un yacimiento fabuloso pero sumamente complicado". Se trata del mayor yacimiento que se haya desarrollado en el mundo desde el descubrimiento de Prudhoe Bay (Alaska a finales del '60).
Las reservas de petróleo se estiman entre 9.000 y 13.000 millones de barriles y entre otras trabajan allí Exxon, ConocoPhillips, Shell y Total. "Se preveía una inversión de 7.000 millones de dólares; ahora ya se habla de 22.000 millones de dólares y de unos cuantos años más de trabajo", explicó.
Sumó dramatismo luego al sostener que "durante cinco meses están bajo cero, todo se congela, vuelan pedazos de hielo que pueden matar a un hombre y hay un 12% de sulfhídrico en el crudo", lo que hace más riesgosa la tarea.
Para colmo, el gobierno de Kazajistán está molesto: quiere que se acelere el proyecto y ver los resultados, pues a esta altura esperaba tener ganancias contantes y sonantes.
AUTOABASTECIMIENTO
Dos días después de la demoledora exposición de Martínez Mosquera, el gerente de proyectos de Repsol-YPF, Roberto Villa, afirmó que de renovarse todas las concesiones petroleras una medida que dicen las petroleras que alentaría las inversiones Argentina tendría rápidamente otros diez años de autoabastecimiento.
Pero el geólogo neuquino fue más allá todavía: afirmó que el petróleo no se va a acabar y detalló que hay muchas áreas que deben ser exploradas exhaustivamente. En esa línea, consideró que una de las principales alternativas para nuestro país la constituyen el mar y la explotación off shore.
(AN)
RODOLFO CHÁVEZ
