Dbido a la cantidad de espacios en desuso y degradados que existen en el centro la ciudad de Neuquén con un gran potencial de uso y estética un grupo de profesionales de la arquitectura regional propone establecer un pequeño edificio que puede ubicarse en diferentes sitios para vitalizarlos y cualificarlos. Se propone así una arquitectura sensible con el sitio.
La idea surgió en el Taller Proyectual que se dictó en la UFLO dirigido por el prestigioso arquitecto español Javier García Solera, donde participaron arquitectos, docentes de las distintas cátedras y alumnos de los últimos cursos de la Facultad de Planeamiento Socio Ambiental de la UFLO. Como informáramos en ediciones anteriores en este mismo suplemento, la Modalidad del taller fue la de producción intensiva de trabajos por equipos, durante tres días, en los que la conversación y la critica por parte del director constituyeron el estimulo y el aporte fundamental para guiar los trabajos.
Por ello, y tras días de debates y discusiones, Natalia Leves, Mercedes Martínez, Gustavo Maidana, Santiago Giuliani, Carolina Rivas y María Eugenia Dovio propusieron un pequeño edificio que tiene la cualidad de ir adaptándose a los diferentes lugares donde pueda ubicarse debido a la flexibilidad de las partes que lo componen. De esta manera las condiciones inalterables de cada lugar, como por ejemplo el recorrido del sol, la dirección del viento, su relación con la calle y la vereda son las que definen su relación con el edificio.
El edificio posee sanitarios, una serie de patios y lugares de estancia con gran flexibilidad para albergar usos diversos, según sea el destino que se le asigne.
"Pensamos este pequeño edificio como soporte para desarrollar ciertas actividades, ocupado por un serie de programas, tales como salas de exposición, cafés, actividades artísticas y culturales que podrán variar en el tiempo según se requiera. En síntesis, es una infraestructura que permite realizar actividades que sirvan para revitalizar sitios de la ciudad caídos en el olvido o descuidados, pero que poseen un gran potencial dormido. Es así que el edificio viene a despertar estas potencias", dijeron sus mentores a eh!.
Se hace foco sobre una zona de la avenida Argentina y las vías del ferrocarril, de la capital neuquina. Este área está delimitada por la avenida, una línea de árboles y las vías casi en desuso. Este lugar que hoy presenta un alto grado de descuido posee enormes cualidades latentes, tanto por su estratégica ubicación, como por su añosa arboleda. Es interesante animarse a pensar, como puede cambiar una situación urbana tan pobre, con una operación tan sencilla, pero inteligente, donde existe una gran economía de recursos para su desarrollo.
Una idea más para considerar que bien puede alimentar otra y crear la sinergia necesaria para construir en pos del bienestar de quienes viven en la capital neuquina.