Este "verde" que pasó, para incluir la primavera y el verano, las estaciones de crecimiento vegetal, ha sido realmente atípico. Por comentarios de calificados viveristas de Bariloche, por ejemplo, supe que prácticamente no han tenido verano y por tanto las plantas han crecido poco y nada.
Pero no solamente observaron este fenómeno generalizado. Un productor de herbáceas y flores de esa región me comentó que en su vivero todo estuvo "patas para arriba"... floraciones anticipadas, otras atrasadas y otras que ni lo uno ni lo otro porque no se "enteraron" que estaban en el verano.
Obviamente no me corresponde a mí analizar el porqué de este batifondo, pero creo que ya todos estamos bastante enterados del cambio climático pero no sabemos a ciencia cierta a qué se lo debe atribuir. Entre toda la pirotecnia de argumentos con la que se nos está bombardeando, se menciona desde la acción del hombre hasta un cambio en el eje del planeta. Tal vez lo que deberíamos tener más en cuenta es la posibilidad de que las temperaturas sean cada vez más extremas... veranos más calurosos e inviernos más fríos... por lo tanto, comprenderán que se hace muy difícil hacer un balance de la temporada que está finalizando y menos que menos hacer pronósticos para nuestros jardines.