ay plantas del jardín de las que obligadamente me tengo que ocupar año tras año. Esto se debe tanto por la belleza que tienen como por lo errático que suele ser su comportamiento ... la camelia es sin duda un buen ejemplo.

Tengo algunos ejemplares en mi jardín que me sirven de testigos, desde hace ya muchos años e inclusive con un trasplante "defacto" el 4 de octubre de 1998, casi a raíz desnuda y un viaje de 20 cuadras sobre un acoplado a pleno sol. Si bien les "tenía fe" porque siempre fueron cultivadas en forma orgánica, me sorprendió que de tres plantas sólo perdiera una sola. A las dos que me quedaron tuve que volver a trasplantarlas, porque le erré con el lugar ... hoy aquí les muestro la floración de una variedad casi blanca con "pintas" rojizas.

FORMACIÓN DE PIMPOLLOS

La Camellia japonica, que es la más cultivada en nuestros jardines, es una suerte de "barómetro climático" muy sensible. Arranquemos desde el momento de la floración, después de la cual requiere un período de reposo de 4 a 6 semanas, durante el que se puede regar un poco menos pero siempre cuidando que jamás se seque el pan de tierra o el suelo. Luego le sigue el crecimiento vegetativo de nuevos brotes.

Durante todo el verano, la planta irá reduciendo ese crecimiento vegetativo para acumular reservas de energía para la floración de la primavera siguiente. Las yemas florales comienzan a formarse al final del verano -marzo-, momento durante el cual sus pimpollos son sensibles a las altas temperaturas. Esto dura todo el otoño, hasta junio más o menos.

Durante el invierno soportan temperaturas de hasta 10 y 15ºC bajo cero, pero esta resistencia depende de cada variedad. Podemos decir que las heladas de unos 6 a 8ºC bajo cero no las afectarán.

CONDICIONES DE FLORACION

En nuestra región, a partir de junio se comienza a definir el éxito de la floración. Si el invierno comienza suave (como este año) se adelanta la apertura de flores y si es muy frío ésta se atrasa hasta comienzos de primavera ... si hay fríos fuertes a comienzos de agosto, las flores se pueden helar y si en ese período los calores aparecen de golpe, los pimpollos abortan y caen.

La camelia necesita una ubicación a media sombra, protegida de los vientos predominantes de nuestra región, del suroeste, fríos y secos. El suelo debe ser similar al de azaleas y rododendros, o sea mullido y capaz de retener humedad para que el área de sus raíces nunca sufra falta de agua, pero con buen drenaje y -ante todo- de reacción ácida, lo que se logra con el agregado de azufre en polvo o mojable (muy usado en los viñedos de la región).

DATOS DE INTERES

En la ficha que la planta mencionada lleva en su tronco y donde anoto fechas, figura como primera floración mediados de agosto de 1990. Posteriormente en su nueva ubicación (con excesiva sombra), anoté entre setiembre y octubre y finalmente, luego del nuevo trasplante a un lugar más iluminado y algo de sol, el 15 de setiembre de 2008 ... este año, sorpresivamente, ya inició la floración en julio.

Estos datos creo que son importantes para los "locos por las plantas", porque demuestran una vez más que muchas plantas reaccionan de forma distinta de acuerdo a la ubicación y los cuidados que les demos en nuestro jardín. Por eso no hay nada mejor que recorrer jardines, hablar con otros "locos", bucear en libros o en esa herramienta estupenda que es Internet ... y -por supuesto- leer esta columna.

"Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo" (Albert Einstein).