Comos un grupo de docentes jubiladas cipoleñas (las que hicieron el libro sobre las calles de la ciudad) a las que nuestra ciudad siempre motiva para hacer algo por ella.

Esta vez la inquietud la dio el eucalipto ubicado en la intersección de la avenida Alem y Kennedy. Su tamaño impone respeto y su soledad, en un predio que es ocupado por circos, parques, feriantes y ladrilleros, nos preocupó.

Investigamos en la municipalidad y encontramos que ya un antiguo y anticipado vecino, don Héctor Lizaso, también había reparado en dicho árbol; pero quisimos saber de su origen, así que recurrimos a antiguos vecinos que habitaron en el lugar.

Fue así que nos contactamos con doña Felisa Caporaso de Pelletier (97 años) y Carlos Rodolfo Caporaso, quienes vivían en la chacra frente al lugar donde se halla dicho árbol. Ellos nos informaron que ese terreno pertenecía a Carola Idizarri, una acaudalada viuda italiana que vivía en el chalet que había allí. Luego ésta marchó a Buenos Aires, donde falleció. En el lugar donde se halla el árbol vivía la familia de Pedro Fuentes.

Según cuenta doña Felisa Caporaso de Pelletier, quien goza de una prodigiosa memoria y una gran curiosidad por lo que pasa en la ciudad, siendo ella pequeña recuerda perfectamente que el eucalipto ya era un árbol de gran tamaño, por lo que asegura que es centenario.

Quién lo haya plantado, tal vez no lo sabremos nunca; pudo haber sido un proveedor como lo era José Delfino, quien abastecía a los obreros del Ferrocarril del Sud, en un alto de su travesía y como testimonio de su paso. Lo cierto es que el majestuoso eucalipto ha sido testigo de la historia de la ciudad.

El objetivo de la presente es hacer conocer la existencia de este árbol (nos han dicho que habría otros dos, localizados uno en el cementerio y otro en la estación), para que los cipoleños los preservemos como parte de nuestra historia.

Hoy el predio en el que se halla pertenece a la municipalidad de Cipolletti y sería conveniente que se lo protegiera con algún cercado, para así evitar su deterioro y se le colocara alguna placa identificatoria para información de quienes por allí pasan.

Con la presente quisimos que nuestros vecinos sepan de su existencia y lo protejan, para que por muchos años nos acompañe y también cumplir con un deseo de aquel querido vecino que fue don Héctor Lizaso.

Agradeciendo la atención que usted presta a todo lo relacionado con nuestra querida región, a veces poco conocido por muchos de los que aquí habitamos, lo saludamos atentamente.

Beatriz Alonso

Nelly Ginnóbili

Ida De Anna

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Aporte realizado por Maipué, Club de Jardinería, de Cipolletti.

Ese eucaliptus fue salvado de la motosierra por Jorge Gavarini (estimativamente en la década del ´80), cuando se estaban realizando tareas de ampliación de la avenida Alem.