Con muchos menos expositores que siempre, el hilo común entre productos muy diversos en esta nueva edición de la tradicional Feria del Mueble de Milán es la búsqueda de una cierta felicidad más en los materiales, y en la cercanía de las formas, que en su extravagancia.
De ahí que este año no se vieron grandes experiencias innovadoras en diseño sino más bien cambios sutiles en artefactos de iluminación y muebles.
De este modo, explotar las formas sencillas y la humildad de los materiales fue el sello que caracterizó a empresas como Santa&Cole, Punt Mobles o Mobles 114, todas ellas acostumbradas a llevarse premios por sus propuestas.
¿Colores? Blancos, negros, crudos y grises. Contornos, suaves. ¿Detalles? De cuero, en su mayoría. Lo tradicional pero aggiornado.
* Entre lo kitsch y el glamour cosmopolita oscilan los estilos.
* Hay una recreación de la herencia clásica para presentarla aggiornada o bien vintage (una onda que no pasa de moda).
* Sillas en policarbonato, la tendencia más consensuada. Sea que venga de Philippe Stark o del último desconocido del mundo design.
* Conciencia ecológica: el slogan que mueve a todos, actualmente.