Rapa Nui ofrece productos artesanales elaborados con la más cuidada materia prima y cuenta con una muy variada línea de chocolate pre-envasado. El sello distintivo es su textura cremosa que se logra con un proceso especial de refinado”, afirman sus responsables a “eH!” cuando presentan sus novedades 2009.”Con toda una historia también riquísima que acompaña”, acotan.
Es que si bien "Rapa Nui" abre sus puertas en local a la calle en Bariloche en 1999, la elaboración del chocolate en la familia data de 1939, cuando el abuelo Aldo Fenoglio fabricaba sus exquisiteces en Italia. Es posible deleitar los sentidos ante finos chocolates en un local que remite en su estética al estilo Art Nouveau vivido en la Europa de pre-guerra, haciendo de este detalle un ícono en honor a los abuelos Fenoglio.
Cuenta la historia que existió un hombre en Italia allá por 1930 que recibió un legado especial: “La elaboración artesanal del chocolate”. Se trataba del abuelo Aldo Fenoglio, quien vivía en Torino (Italia), y antes de la II Guerra Mundial ya trabajaba en la creación de finas exquisiteces como trufas, bombones y otras delicias, que sus manos y las de los integrantes de la familia elaboraban con dedicación.
El abuelo vivía en la Italia feliz, hasta que en 1939, por la guerra, tuvo que emigrar, llevando consigo algunas maletas cargadas de tradición chocolatera. Llega a Bariloche en 1942 y se instala por primera vez en la aldea. Elige un lugar sobre la calle San Martín (hoy Inch) y en él instaló una cafetería y su elaboración artesanal de chocolates, que prontamente lo colocaría en un lugar de importante fama regional. La empresa familiar crecía rápidamente y dos de sus tres hijos -Diego y Laura Fenoglio- comenzaban a participar en la elaboración de las exquisiteces.
En los años venideros comenzarían las exportaciones y el tamaño de su producción la colocaría en el lugar de líder en toda la región y el país. Pese al crecimiento, las bases fundadas en la “elaboración artesanal” nunca se perdieron sino que se perfeccionaron aún más.
De la mano de Diego y Laura todo se desarrollaba plenamente pero llegando a cumplir un ciclo los hermanos estaban ante al momento en el que sus caminos tomarían diferentes rumbos.
En 1995, continuando con la antigua tradición Fenoglio y respetando y revalorando la calidad por sobre todas las cosas, Diego Fenoglio (el hijo mayor de Aldo) inaugura “Rapa Nui”, con un local de elaboración y venta en la calle Mitre al 202, una nueva marca que encierra “la historia” de fidelidad y amor por el chocolate.
Así como Diego con su padre, sus hijos, Aldo y Leticia, también decidieron apoyar la deliciosa idea, concretando un equipo de trabajo que marca el nuevo camino hacia adelante. A ellos es que les preguntamos ¿en qué se diferencia “Rapa Nui” de otras empresas?
-Desarrollamos nuestros productos con un estricto control de nuestra mano de obra y en especial sobre las materias primas que utilizamos, elaborando nuestros chocolates a partir de la pasta de cacao, diferenciándonos de empresas locales del mismo rubro.
Para preservar el sabor de nuestros productos no utilizamos conservantes, ni aditivos, solo productos genuinos. Todos los procesos e ingredientes hacen a nuestra calidad. Desde el grano de cacao cuidadosamente seleccionado que nos da un exquisito sabor, hasta el concado, proceso que se encarga de nuestra exclusiva textura cremosa.
-¿Qué productos exclusivos tienen Uds.?
- Somos los creadores de un producto único en el mundo al que llamamos Fra-Nui. Se trata de frambuesas de El Bolsón bañadas en dos chocolates que al degustarlas generan una explosión de sabores en el paladar.
Otro producto exclusivo nuestro es el Rapanuino. Una delicada base de chocolate amargo, cubierta con finas almendras, avellanas, nueces, miel y cerezas.
-¿En qué nuevos emprendimientos andan pensando?
- Hace un año anexamos a nuestra chocolatería una cafetería donde se pueden degustar otras exquisiteces creadas por nosotros como por ejemplo los alfajores de dulce de leche con almendras y avellanas, los de frambuesa y los de Mouse de chocolate. Y en este momento estamos desarrollando una línea de helados artesanales para que en un futuro próximo podamos inaugurar la heladería Rapa Nui.
DE GENERACIÓN EN GENERACIÓN
Textual de Diego Fenoglio:
“Es un placer para mí como segunda generación de chocolatero saber que mis hijos también desean continuar con la historia chocolatera de la familia, esa historia que comenzó mi padre Aldo Fenoglio allá por 1939 en Torino, Italia. Leticia y Aldo continúan aportando lo suyo debido a que desde chiquitos les encantaba visitarme en la fábrica y aprender la elaboración de los diferentes productos, al igual que hoy lo hace mi hijo más chico Julián, que también será un futuro chocolatero. Hoy me enorgullece decir que tanto Leticia como Aldo son personas medidas, respetuosas del otro, perseverantes, creativos, y trabajadores.
Por todo esto ya les he cedido la dirección de la empresa. Creo que es muy bueno que aprendan mientras todavía yo esté en condiciones de ayudarlos en su crecimiento”.