Una casa frente al mar tiene su carácter particular. No solamente por la inspiración que le presta al estilo náutico sino por los requerimientos técnicos que implica la cercanía al océano. Si además se busca definir la vivienda en términos arquitectónicos modernos, una construcción de este tipo es toda una obra donde se conjuga conocimiento e intuición. Carlos Wahnon (wahnon@fibertel.com.ar), arquitecto, domina el savoir-faire de la casa frente a la playa, con esta magnifica construcción a metros de la costa en Punta del Este, Uruguay, que funciona como vivienda permanente.
El resultado de un año de trabajo en este proyecto, es la felicidad de una familia joven. Aquí, cada integrante tiene sus espacios de diversión, descanso, actividad intelectual y social, siempre manteniendo la vista al mar, tan agradable. La implantación de la residencia en el terreno y su forma alargada surgen de la orientación hacia el sudeste, requerimiento indispensable del cliente que espera disfrutar de la cercanía al océano todo el tiempo.
Un arquitecto conocedor sabe que no siempre es aconsejable tener vistas al sur en este lugar debido a los fuertes vientos y la salinidad. Sin embargo tecnológicamente Wahnon supo resolver los inconvenientes: "Se tomaron todas las previsiones, como equipar la casa con carpintería de aluminio, el top de la gama existente; o utilizar para los ventanales vidrio con termo paneles, es decir con cámara de aire en el medio para que tenga mayor aislamiento térmico tanto en invierno como verano. Escogimos materiales de alta resistencia, la piedra, el hormigón, y la madera de lapacho, esta última especial para emplearla en la costa ya que va tomando con el tiempo este tono grisáceo, más marino. Todos los herrajes son de acero inoxidable. Todas las losas y los pisos son de cemento."
Protegiendo la casa del calor, de cara hacia el norte, se compuso un volumen de servicios señalado con recubrimiento al exterior en piedra. En esta franja a lo largo de la caja, pasan todas las instalaciones de la vivienda, los baños, la cocina, las duchas, los vestidores, los placard; dejando hacia el sur y hacia el mar, los dormitorios y el área social caracterizados como un volumen de hormigón, vidrio y muros blancos. Para rescatar la luz natural del norte, sin embargo, se estableció una diferencia de techos donde emerge una abertura continua de ventana de 30 cm. de altura por toda la longitud de la construcción.
La casa cuenta con dos accesos, uno por el frente, y otro, el más utilizado, para llegar desde la playa entrando por la cochera. A este nivel cero, se encuentra una ducha con sauna. Este servicio se planeó para el confort de los habitantes: "Pensamos esto para cuando la familia llega de la playa, enciende el sauna, se da una ducha, se hace un sauna, se vuelve a la ducha. Entonces luego se sube limpio a la casa, sin arena", apunta Carlos. Luego se llega al gran espacio abierto del primer piso. Salón y comedor integrados, con la posibilidad de ser unidos o separados de la cocina o de la terraza semicubierta configuran un espacio adaptado al estilo de vida de los habitantes, para quienes la actividad social es muy activa.
En verano cuando las ventanas pueden dejarse abiertas de par en par, el interior y el exterior son uno solo. Esta planta se prolonga en el deck y piscina que se funden al horizonte. En el segundo piso, el área de alcobas en un ambiente más íntimo, se disfrutan en relax total. "La master suite es un ambiente importante, el cliente soñaba con un lugar amplio con terraza, con ver el atardecer, por lo cual, justo en el centro del paño vidriado central se oculta el sol. Todo esto fue cotejado mediante la construcción de renders (Es decir, visualizaciones del modelo a través de la tecnología digital. Estas son en tercera dimensión y muestran detalles como la escala, la iluminación, la textura con bastante realismo). Se verificó posición, tanto con fecha, como coordenadas de latitud y longitud para saber exactamente donde se pone el sol. Se hizo toda la simulación antes de hacer la obra para comprobar que el espacio quedaría tal como lo imaginaba”.
Como si esta serie de ambientes no fuera suficiente garantía de confort y bienestar, desde la suite principal se puede subir a una terraza, la cuarta planta de la casa, en donde se genera una situación de deck VIP, para disfrutar de la vista a 360º, contemplando tanto la salida como la puesta del sol y el cielo estrellado en la noche. Después de esto, ante la pregunta ¿Qué es lo que más le gusta de la casa? El arquitecto responde: "Me gusta todo, la composición completa. El cliente disfruta especialmente estar en su escritorio mirando a Punta Ballena y por la tarde en general subir a la terraza a ver la puesta del sol, con amigos"
En cuanto a la decoración, Carlos también planteó algunas consignas a seguir para que arquitectura y amoblado estuviesen en armonía. "Sugerí que algunos muebles, la vajilla, los accesorios fueran blancos. Que las sábanas fueran de algodón. Escogí diseño moderno para los muebles del salón, el comedor y el escritorio. También les propuse algunos accesorios en rojo para que generen puntos de interés, y aviven los ambientes”. Sin ser una decoración recargada, en cada lugar hay una dinámica entre el design y el estilo de vida, además de suplir todas las necesidades de la familia. El resultado es una casa para vivirla intensamente durante todas las estaciones del año.