| | | | | | | | | LOS PLÁTANOS Y LAS ALERGIAS | | Consultamos a la doctora Laura Vega, alergista de NeuquÉn. Ella comprobÓ que son los pastos y las hierbas los causantes y poco los Árboles. | | | | | | | | | | | | | | Uno de los problemas habituales de salud al fin del invierno y comienzo de la primavera, además de los resfríos y la gripe, son las alergias. Y cuando se trata de buscar el o los culpables de este estado de salud, caen en la volteada -¡cuando no!-, los árboles. Tanto médicos como aficionados, al no tener elementos de juicio valederos a mano, le echan la culpa especialmente al plátano (Platanus acerifolia) y a la pelusa de los álamos. Para saber algo sobre el tema anduve “webeando” (ojo, léase bien) en Internet y quedé desconcertado como Adán en el Día de la Madre … realmente no encontré nada que lo sindicara como alergénico pero sí abundante información sobre otro árbol que plantamos profusamente en nuestras veredas … el fresno americano (Fraxinus excelsior), que pasaría entonces a ocupar el primer lugar entre “los malos de la película”. En busca de la verdad, decidí ponerle un abogado defensor al plátano. Por eso elegí a la doctora Laura Vega, alergista e investigadora reconocida a nivel mundial, quien vive en Neuquén y tiene más de veinte años de experiencia en el Valle … y no me venga con el archiconocido dicho de “qué va a ser famosa, si es mi vecina” … en el blog de eH usted encontrará este material ampliado y una reseña de sus actividades (*). CAUSAS DE LAS ALERGIAS Hacia fines de agosto y en setiembre si usted estornuda, le gotea la nariz, le pican y lloran los ojos, le pican el paladar y los oídos, es posible que usted sufra de rinitis alérgica estacional, la alergia más frecuente en Neuquén y en el Alto Valle. Si además usted empeora los días de viento, o a la mañana temprano o a la tardecita, o cuando corta el pasto de su jardín, y mejora cuando sale del Valle, o cuando llueve, entonces es muy probable que su alergia esté causada por pólenes. El polen se transporta ya sea por los insectos, o por el viento. El que produce más alergia es el polen transportado por el viento, que es liberado en grandes cantidades a la atmósfera, cuyos granos son lo suficientemente pequeños como para penetrar en la vía respiratoria . CULPABLES AL BANQUILLO Los pólenes que realmente producen alergias son los de pastos y malezas. Empieza a haber polen en el aire entre mediados y fines de agosto, y esto se mantiene hasta fines de mayo, con picos en setiembre, octubre, diciembre, febrero y marzo (con variaciones cada año). La pelusa del álamo no produce alergia. En la época en que aparece (y es tan grande que se ve), florecen los pastos (que no se ven, pero penetran en las vías respiratorias). De los árboles de la región, el único que produce alergia es el fresno. No así el olmo, el aromo, el tilo o el plátano. En 1984 se creó el Consultorio Externo de Alergia en la policlínica ADOS Neuquén y se comenzó esta investigación. Hasta esa fecha no existía información alguna acerca de los alergenos ni sobre las alergias de la región. Los pacientes que consultaban decían: “En el Valle hay mucha alergia” y suponían que la causa era el viento, los pesticidas utilizados en la fruticultura y los métodos de lucha contra las heladas. Estaba todo por hacer. Por tal motivo, entre los años 1987-1990 se realizó un muestreo en 1.404 pacientes, seleccionándose 194 que presentaban síntomas compatibles con alergia a quienes se dividió en tres grupos: 57 con asma alérgico, 70 con rinitis alérgica y 67 no alérgicos. En el grupo de los no alérgicos, los más numerosos (40), sufrían de rinitis irritativas inespecíficas, dato muy similar al descrito en Arizona (USA) y 5 tuvieron intoxicación crónica con pesticidas organofosforados (*). Quedaba por confirmar la presencia en el medio ambiente de aquellos alergenos a los que estaban sensibilizados. MONITOREO En el período que va de marzo de 1996 a setiembre de 1997, se monitoreó el aire en busca de granos de polen y esporas de hongos aerógenos, con un Burkard atrapa esporas volumétrico automático, situado a 8 metros sobre el nivel de la calle, en la Estación del INTA en Guerrico (Río Negro), a cargo del agrometeorólogo Gustavo Nordenström. Cabe acotar que fue la primera vez que se monitoreó polen con Burkard en el Valle. Las muestras fueron preparadas en Neuquén por Laura Vega y analizadas en el PROGEBA Bariloche por la doctora María Martha Bianchi, con técnicas standard, en microscopio óptico. Los resultados encontrados coinciden con la sensibilización de los pacientes (pólenes no arbóreos), y con la época en que presentan síntomas (primavera-verano). Los pólenes que causan sensibilización alérgica en la zona son las gramíneas (pastos en general), el Chenopodium (quinoa, paico, amaranto) y el Plantago (llantén). La estación polínica es extensa (va desde agosto a mayo), lo que causa la enorme frecuencia de rinitis alérgica que observamos en la región. Las gramíneas comienzan a polinizar en setiembre, hacen pico en octubre, y terminan de polinizar en abril. El Plantago comienza en setiembre, hace pico en enero y termina en mayo. El Chenopodium comienza en setiembre, con picos en setiembre, febrero, marzo y termina en mayo. Es interesante que en el monitoreo, a comienzos de la primavera encontramos pólenes de Notophagus (ñire, lenga y otros árboles del bosque andino patagónico, que no causan alergia), que han sido transportados hasta aquí por el viento. Del polen arbóreo hallado en el monitoreo, el que causa alergia es el fresno (Fraxinus sp), ya que da reacción cruzada con el olivo. En el monitoreo aparecen también partículas de carbón (que bloquearon el equipo en la primavera de 1997), como consecuencia de la quema de gasoil en la lucha contra las heladas. Los pacientes sensibilizados a Alternaria presentaban síntomas principalmente perennes y predominaban los asmáticos. La Alternaria es el hongo aerógeno predominante, con picos importantes en marzo, abril y mayo (otoño), y sería factor de riesgo para la aparición de asma, tal como se ha descrito en Arizona. Fuente: L. Vega, M.M. Bianchi y G. Nordenström. ADOS Hospital, Neuquén, Argentina.
CAZAESPORAS BURKARD El muestreador Burkard consta de dos compartimientos y una veleta que lo orienta en la dirección del viento. El compartimiento superior contiene un mecanismo de relojería que hace girar un tambor. El tambor sostiene una cinta con propiedades adhesivas de 345 mm de largo por 20 mm de ancho. El compartimiento inferior contiene una bomba aspirante accionada por un motor eléctrico que produce una corriente de aire hacia el interior del muestreador. El aire penetra por la ranura, impacta sobre la cinta adhesiva y es expulsado desde el compartimiento inferior. El tambor rota a una velocidad de 2 mm por hora. Sobre la cinta impactan los granos de polen y esporas. La cinta se renueva semanalmente, a la misma hora. Semanalmente se montan los preparados: se despega la cinta del tambor y se corta en siete segmentos de 48 mm sobre una regla de acrílico. Cada segmento se coloca sobre un portaobjetos rotulado, se tiñe y se cubre con cubreobjeto. Cada uno contiene la información de 24 horas de muestreo continuo. De ese modo se mide tipo y cantidad de granos de polen y esporas por metro cúbico de aire a lo largo de las 24 horas del día. CONCLUSIONES Según el estudio realizado por la doctora Laura Vega y sus colaboradores, tal como ocurre en climas similares semiáridos, en la Patagonia existe un predominio de rinitis alérgica sensibilizada a pólenes no arbóreos (Gramíneas, Chenopodium, Plantago) y arbóreo (fresno). No alérgica irritativa, debido a la gran oferta de partículas en suspensión, teniendo en cuenta el tipo de suelo, el clima y los vientos. En los países nórdicos, el abedul y sus parientes (castaño, avellano, etc) y en el Mediterráneo el olivo y parientes (fresno, que da reacción cruzada con el olivo). La alergia depende de la abundancia de oferta de polen en el aire y de cómo este polen llega a las vías respiratorias. Por eso las plantas más alergénicas son aquellas cuyos granos de polen son transportados por el viento, y que tienen un período largo de floración: en el Valle, esas plantas son los pastos y malezas. El hongo predominante, la Alternaria, es también un hongo de zonas semiáridas, probable factor de riesgo para asma en nuestra zona y no así los ácaros, alergenos predisponentes al asma en zonas húmedas, pues aquí prácticamente no hay. Existen casos de intoxicación crónica con pesticidas organofosforados, que probablemente son subdiagnosticados, ya que dan síntomas muy similares a los alérgicos y desgraciadamente debido a una rutina en los laboratorios de análisis clínicos no se realiza el análisis de la colinesterasa eritrocitaria, que serviría para orientar al diagnóstico correcto. Existe contaminación del aire y las partículas de carbón que taparon la boca de entrada del equipo así lo prueban, pero jamás ha sido medida. Entonces no sabemos si la calidad del aire que respiramos es aceptable o no, en una región donde el tránsito vehicular es muy importante, como también la lucha estacional contra las heladas. Para llegar a estas conclusiones fueron necesarios 18 años de trabajo. El financiamiento, aunque magro, existió entre 1987 y 1993, época en que el ámbito de trabajo se desarrolló en la UNC (IUCS). Desde 1984 a 1987, y a partir de junio de 1993, el financiamiento fue personal. Mas información: Resumen del trabajo Qué nos hace estornudar en primavera? Hacia fines de agosto y en septiembre usted estornuda, le gotea la nariz, le pican y lloran los ojos, le pican el paladar y los oidos? . En ese caso, es posible que usted sufra de rinitis alérgica estacional, la alergia más frecuente en Neuquén y en el Alto Valle. Si además usted empeora los días de viento, o a la mañana temprano o a la tardecita, o cuando corta el pasto de su jardín, y mejora cuando sale del Valle, o cuando llueve, entonces es muy probable que su alergia esté causada por pólenes. Qué es el polen? Es el polvillo fecundante formado por los gametos de las flores masculinas (equivalente del espermatozoide) que, al fecundar a las flores femeninas, forma una planta nueva . El polen se transporta ya sea por los insectos, o por el viento. El polen que produce más alergia es el polen transportado por el viento, que es liberado en grandes cantidades a la atmósfera, cuyos granos son lo suficientemente pequeños como para penetrar en la vía respiratoria . En Neuquén y el Alto Valle qué pólenes producen alergia? Los pólenes de pastos y malezas. Empieza a haber polen en el aire entre mediados y fines de agosto, y esto se mantiene hasta fines de mayo, con picos en septiembre, octubre, diciembre, febrero y marzo (con variaciones cada año ). La pelusa del álamo no produce alergia. En la época en que aparece (y es tan grande que se ve), florecen los pastos (que no se ven, pero penetran en las vías respiratorias). De los árboles de la región, el único que produce alergia es el fresno. No así el olmo, el aromo, el tilo o el plátano. Es muy común en Neuquén, zona de migración interna en nuestro país, que personas que vienen de otras regiones, a los 3, 4 ó 5 años de residencia en la zona comiencen a tener síntomas de estornudos en primavera. Cada año esos síntomas empeoran y duran más tiempo, se agrega silbido en el pecho y fatiga y llega un momento en que las molestias duran todo el año. Más del 40% de la gente que sufre de alergia relacionada con el polen, es alérgica a algunas comidas vegetales (frutas y/o verduras) . Esto se conoce como reacción cruzada. Los síntomas son: picazón e hinchazón de labios y de la boca luego de comer, por ejemplo en los alérgicos a los pastos, damasco, cereza, cítricos, durazno, ciruela. El Valle es un oasis donde se practica la fruticultura bajo riego (manzanas, peras, duraznos, vides). Existe una producción importante de sidra y de vinos finos. El Valle debe su existencia al trabajo de los inmigrantes italianos y españoles que vinieron a poblar la Argentina a comienzos del Siglo XX, y también franceses, alemanes, rusos, centroeuropeos, etc. Con 541. 924 habitantes(censo 2001) (2, 3), es la región más poblada de la Patagonia Argentina. En 1930 Habitaban en El Valle 28. 000 personas, 133. 000 en 1960. A partir de los años 60, El Valle evolucionó como una "ciudad dispersa"(4, 5, 6): ciudades y pueblos separados unos de otros pero que funcionan como una sola ciudad grande. El centro es Neuquén, y los límites son Chichinales, Senillosa, San Patricio del Chañar y Barda del Medio. La fuente económica más importante es la fruticultura, en la que se utilizan muchos pesticidas, y también medios de lucha contra las heladas tardías de la primavera que ponen en riesgo la producción frutícola. Para eso se utilizan calefactores de gasoil por períodos variables cada año, y de acuerdo a las condiciones climáticas. Las mañanas que siguen a una noche de lucha contra las heladas se presenta con el aire negro, cerca de las chacras no se ve a más de 1 m de distancia. Pero la contaminación del aire no ha sido jamás medida. Entonces, no se conoce la cantidad de pesticidas que pueda tener el aire que se respira, como tampoco las partículas menores a 10 micras, ni el ozono, ni el monóxido de carbono, ni el óxido de azufre, ni el dióxido de nitrógeno, ni las partículas diesel que se producen por el tráfico vehicular de esta zona, indudablemente muy transitada. Desde los años 70 se agrega la explotación de petróleo (actividad reconocida como productora de contaminación ), a las actividades de la región . La Patagonia es conocida por el viento, y así es, la recorren vientos muy fuertes, sobre todo en primavera, procedentes del Oeste, de la cordillera de los Andes. A veces hay ráfagas de hasta 140km por hora. El promedio anual es de 6 km /h/día. Por esa causa, y para proteger la producción frutícola, las chacras tienen setos vivos de álamos. La capa superficial del suelo está formada por limos, arenas y arcillas. De tal modo, se respiran muchas partículas en suspensión en los días ventosos. En 1984, época en que comienza esta investigación, año en que se crea el Consultorio Externo de Alergia en el Policlínico ADOS Neuquén, no existía información alguna acerca de los alergenos ni sobre las alergias de la región. Los pacientes que consultaban decían: «en el Valle hay mucha alergia», y suponían que la causa era el viento, los pesticidas utilizados en la fruticultura y los métodos de lucha contra las heladas. Estaba, entonces, todo por hacer. A lo largo de 3 años (1987- 1990), consultaron en Consultorio Externo de Alergia ADOS Nqn 1.404 pacientes, de los cuales seleccionamos 194 para este trabajo. Eran enfermos que presentaban síntomas respiratorios compatibles con alergia. El examen clínico, los estudios complementarios y la testificación cutánea alergológica permitieron dividirlos en 3 grupos: 57 con asma alérgico, 70 con rinitis alérgica y 67 no alérgicos. En el grupo de los no alérgicos, los más numerosos (40), sufrían de rinitis irritativas inespecíficas, dato muy similar al descripto en Arizona (USA) (7, 8, 9). 5 tuvieron intoxicación crónica con pesticidas organofosforados. Desgraciadamente, nuestra recomendación del momento (10), acerca de la necesidad de hacer accesible en los laboratorios de la zona el dosaje de colinesterasa eritrocitaria nunca fue escuchada, y el único medio de rutina de que disponemos para diagnóstico de intoxicación crónica, es el dosaje de colinesterasa plasmática, de relativa utilidad (11, 12). Otros no alérgicos eran fumadores, activos o pasivos, y 2 pacientes tuvieron asma profesional. Los análisis estadísticos fueron efectuados por el Profesor Omar Alvarez, de la UNC. Encontramos utilizando el test de Pearson (10), una relación entre rinitis alérgica y sensibilización a polen de gramíneas, hallazgo ya descripto en la literatura médica, de la que cito un ejemplo (13). Las sensibilizaciones más frecuentes fueron 1- pólenes de gramíneas y malezas, 2- ácaros del polvo doméstico (Dermatophagoides Pteronyssinus), y 3- alternaria (hongo aerógeno). Muy poca sensibilización al epitelio de animales domésticos, (perro, gato). En cuanto a las características del asma, los varones menores de 10 años estaban más afectados que las mujeres, pero luego de los 45 años estaban más afectadas las mujeres. La rinitis hacía su aparición hacia los 7 años, y se producía un pico en la adolescencia. Muchos pacientes comenzaban a sufrir de rinitis luego de vivir en El Valle 2, 3 o 4 años (el tiempo necesario para sensibilizarse a los pólenes predominantes en la zona). Y la rinitis que comenzaba siendo estacional, con el tiempo se transformaba en perenne, y en algunos casos, además de empeorar con más bloqueo nasal y tos, se agregaba dificultad para respirar (síntomas de asma). Alrededor del 40% de los pacientes que sufrían de rinitis alérgica sensibilizada a pólenes sufrían también del "síndrome oral": hinchazón de los labios, picazón de garganta, paladar y oídos al comer algunos tipos de frutas o verduras. Prácticamente no existía alergia por encima de los 65 años. Alrededor del 70% de los pacientes alérgicos tenían antecedentes de alergia en su familia de origen. (10) Teníamos entonces, la primera descripción de nuestros pacientes. Quedaba por confirmar la presencia en el medio ambiente de aquellos alergenos a los que estaban sensibilizados. AcarosBuscamos los ácaros en los colchones de nuestros pacientes. Seleccionamos al azar 11 pacientes que se atendían en Consultorio Externo de Alergia de ADOS Neuquén. Todos ellos tenían tests cutáneos positivos para el Dpt (Dermatophagoides Pteronyssinus ), y para el Df (Dermatophagoides Farinae). Utilizamos como control a 2 individuos de la Provincia de Santa Fe, donde se conoce la población de ácaros (14). Recogimos las muestras de polvo de los colchones con aspiradora utilizando la técnica standard. Las muestras fueron analizadas por la Dra Laurence Guérin en el Laboratorio Allerbio, Francia, y rechequeadas por la Dra Barbara Hart en la Universidad de Cirencester, Inglaterra. De 11 muestras del Valle, solamente en 4 encontramos ácaros, en cantidad mínima. Las 4 muestras tenían Dpt, y en una de ellas había además, un Euroglifo Maynei. Las 2 muestras control de la Provincia de Santa Fe tenían ácaros (Dpt y Cheyletus) en notable mayor cantidad que las muestras positivas del Valle (15). La pregunta es, entonces: por qué si los enfermos están sensibilizados encontramos tan pocos ácaros?, sería posible que estuviéramos en presencia de una reacción cruzada con algún organismo similar? Quizás los ácaros de los frutales, o las garrapatas?Por otra parte, la predisposición genética pudiera ser más importante que la exposición al alergeno, y no existiría umbral para la sensibilización. Es el punto de vista de ciertos investigadores nórdicos y sudafricanos. (16, 17, 18). De todos modos, y en relación con el clima, el resultado es razonable: mucho sol (8 horas por día de promedio anual) y poca humedad, no son buenas condiciones para el desarrollo de los ácaros. Pólenes, hongos aerógenos, partículas de carbón En el período que va de marzo de 1996 a Septiembre de 1997, monitoreamos el aire en busca de granos de polen y esporas de hongos aerógenos, con un Burkard atrapa esporas volumétrico automático, situado a 8 m sobre el nivel de la calle, en la Estación INTA de Guerrico (Pcia de Río Negro). Estuvo a cargo del mismo el agrometeorólogo Gustavo Nordestrom. Por dificultades técnicas, se perdieron los datos de los meses de invierno (junio, julio y agosto)Las muestras, preparadas en Neuquén por la Dra Laura Vega, fueron analizadas en PROGEBA Bariloche * por la Dra María Martha Bianchi, con técnicas standard, en microscopio óptico. (El muestreador Burkard consta de dos compartimientos y una veleta que lo orienta en la dirección del viento. El compartimento superior contiene un mecanismo de relojería que hace girar un tambor. El tambor sostiene una cinta con propiedades adhesivas de 345mm de largo por 20 mm de ancho. El compartimento inferior contiene una bomba aspirante accionada por un motor eléctrico que produce una corriente de aire hacia el interior del muestreador. El aire penetra por la ranura, impacta sobre la cinta adhesiva y es expulsado desde el compartimento inferior. El tambor rota a una velocidad de 2mm por hora. Sobre la cinta impactan los granos de polen y esporas. La cinta se renueva semanalmente, a la misma hora. Semanalmente se montan los preparados: se despega la cinta del tambor y se corta en siete segmentos de 48 mm sobre una regla de acrílico. Cada segmento se coloca sobre un portaobjetos rotulado, se tiñe y se cubre con cubreobjeto. Cada uno contiene la información de 24 horas de muestreo continuo. Tipo y cantidad de granos de polen y esporas por metro cúbico de aire a lo largo de las 24 horas del día)(19). * El Progeba Bariloche fue cerrado y desmantelado en 1999 . En el mismo período se seleccionaron al azar 180 pacientes que se atendían en Consultorio Externo de Alergia en ADOS Neuquén. Los pacientes sufrían sobre todo de rinitis alérgica, sola o asociada a asma. El resultado de los tests cutáneos efectuados a estos pacientes fue: Dpt 47%, Df 42%, 40% pólenes de Gramíneas, 22% polen de Chenopodium, 22% polen de Plantago, 26% Alternaria (hongo aerógeno). 20% tenían tests cutáneos negativos. Fue la primera vez que se monitoreó polen con Burkard en El Valle. Los resultados encontrados coinciden con la sensibilización de los pacientes (pólenes no arbóreos), y con la época en que presentan síntomas (primavera-verano). Los pólenes que causan sensibilización alérgica en la zona son las Gramíneas, el Chenopodium y el Plantago. La estación polínica es extensa (va desde agosto a mayo), lo que causa la enorme frecuencia de rinitis alérgica que observamos en la región. Las gramíneas comienzan a polinizar en septiembre, hacen pico en octubre, y terminan de polinizar en abril. El Plantago comienza en septiembre, hace pico en enero y termina en mayo. El Chenopodium comienza en septiembre, con picos en septiembre, febrero, marzo y termina en mayo. Es interesante que en el monitoreo, a comienzos de la primavera encontramos pólenes de Notophagus (árboles de la cordillera, del bosque andino patagónico, que no causan alergia), que han sido transportados hasta aquí por el viento. Del polen arbóreo hallado en el monitoreo, el que causa alergia es el fresno, ya que da reacción cruzada con el olivo (20, 21, 22)En el monitoreo aparecen también partículas de carbón (que bloquearon el equipo en la primavera de 1997 ), como consecuencia de la quema de gasoil en la lucha contra las heladas (23). Los pacientes sensibilizados a Alternaria presentaban síntomas principalmente perennes, y predominaban los asmáticos. En el monitoreo encontramos fungi imperfecti identificados como Helminthosporium y Basidiosporos, con presencia mínima. No encontramos Cladosporium. La Alternaria es el hongo aerógeno predominante, (24) con picos importantes en marzo, abril y mayo (otoño), y sería factor de riesgo para la aparición de asma, tal como se ha descripto en Arizona (25). Conclusiones Tal como ocurre en climas similares semiáridos, existe un predominio de rinitis en la patología respiratoria de los habitantes del Alto Valle del Río Negro y Neuquén. Alérgica sensibilizada a pólenes no arbóreos (Gramíneas, Chenopodium, Plantago) y arbóreo (fresno). No alérgica irritativa, debido a la gran oferta de partículas en suspensión, teniendo en cuenta el tipo de suelo, el clima y los vientos. El 55% de nuestros 374 pacientes presentó rinitis, el 17, 37% asma bronquial y el 27, 5% ambas patologías. Es conocida la frecuente asociación de ambas enfermedades (26)Será, quizás parafraseando a Ezeamuzi (27), quien describe en Kuwait al Chenopodium como uno de los alergenos principales de su región, que este sea el precio a pagar por transformar el desierto en una zona más "verde" . Los principales alergenos son pólenes que han sido introducidos por la inmigración en la zona, con las actividades agrícolas. El hongo predominante, la Alternaria, es también un hongo de zonas semiáridas, probable factor de riesgo para asma en nuestra zona, contrariamente a los ácaros, alergenos predisponentes al asma en zonas húmedas. (Eso explica por qué muchos asmáticos que llegan al Valle procedentes de Buenos Aires -u otras regiones húmedas- suelen mejorar de su asma). Acaros prácticamente no hay, situación totalmente concordante con las características climáticas. Existen casos de intoxicación crónica con pesticidas organofosforados, que probablemente son subdiagnosticados ya que dan síntomas muy similares a los alérgicos, y desgraciadamente de rutina en los laboratorios de análisis clínicos no se realiza el análisis de la colinesterasa eritrocitaria, que serviría para orientar al diagnóstico correcto. Existe contaminación del aire. Las partículas de carbón que taparon la boca de entrada del equipo así lo prueban. Pero jamás ha sido medida. Entonces, no sabemos si la calidad del aire que respiramos es aceptable o no, en una región donde el tránsito vehicular es muy importante, como también la lucha estacional contra las heladas. Nos ha llevado 18 años de trabajo llegar a estas conclusiones. El financiamiento, aunque magro, existió entre 1987 y 1993, época en que el ámbito de trabajo se desarrolló en la UNC (IUCS). Desde 1984 a 1987, y a partir de junio de 1993, el financiamiento fue personal. http://ecosrioplatenses.org.ar/ Alergia y plátanos,informe a la diputada Clori Yelicic Dip. Clori Yelicic, Presidenta de la Comisión de Salud de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires Ref. Nota Nº339/C/SALUD - Solicitud de informes acerca de:Efectos que ocasiona la plantación de árboles de la especie Plátano (Platanus hispanica) sobre la salud de la población alérgica. Estudios poblacionales, de admisión hospitalaria y/o de costo en gastos de salud, han demostrado que en los últimos cuarenta años, las enfermedades alérgicas en especial el asma bronquial y la rinoconjuntivitis alérgica, han experimentado un claro aumento de su prevalencia. Cuarenta años, es un período demasiado corto de tiempo para que algún tipo de cambio genético haya sido responsable de dicho aumento. Por el contrario, todas las evidencias actuales apuntan a los cambios medioambientales ocurridos en las cuatro décadas precedentes como responsables, al menos en gran parte, de no solo el aumento de la prevalencia sino además de la mayor dificultad en el tratamiento de las mismas. Esos cambios, tanto los medioambientales como los relacionados con el asma y la rinitis alérgica, se han producido principalmente en países desarrollados, por lo que a menudo son referidos como “cambios por occidentalización del estilo de vida” (1).Hasta hace algunos años, era frecuente que a los pacientes alérgicos se les restringiera el contacto con el exterior, con el fin de prevenir la exposición a supuestos agresores medioambientales tales como viento, rocío, cambio climático, humedad, y algunos alergenos del tipo de los hongos y pólenes. Lamentablemente, en la actualidad, este escaso contacto con el exterior constituye un hábito social y no una indicación médica. Así, en los países industrializados, la mayoría de los individuos pasan gran parte de su vida en espacios cerrados, mal ventilados, con elevada humedad relativa, presencia de alfombrados, cortinados, muñecos de paño, mascotas hogareñas y plantas, donde el aire puede contener contaminantes en concentraciones superiores a las que se encuentran en el exterior. En consecuencia, la calidad del aire en esos espacios cerrados es considerada actualmente tan importante o más que la calidad del aire del exterior para la salud en general y para las enfermedades alérgicas respiratorias en particular (2,3,4).La calidad del medioambiente exterior también se vio alterada drásticamente en las últimas décadas por la deforestación indiscriminada de grandes áreas selváticas, incremento del parque automotor con el aumento directo de las emanaciones derivadas del petróleo, efecto invernadero por la quema de pastizales, uso indiscriminado de insecticidas, pesticidas, aerosoles y la falta de medidas de control de contaminación en las grandes industrias, entre otras causas. Si consideramos los alergenos que sensibilizan más frecuentemente a la población atópica, un estudio de población infantil de Buenos Aires (5), encontró que sobre 584 pacientes con síntomas bronquiales obstructivos de 1 a 18 años de edad, que presentaban rinitis asociada en el 60% de los casos y dermatitis atópica en el 12,5%, el 66% resultó alérgico al menos a un alergeno inhalante, siendo los sensibilizantes más frecuentes: Dermatophagoides (56%), Alternaria (18%), Cucarachas (16%), epitelios de perro y gato (13%), pólenes de gramíneas (12%) y plátano (8%). En Rosario, una ciudad con características climáticas similares a Buenos Aires y con una importante población de árboles de la especie Platanus hispanica, los hallazgos fueron similares (6). La prevalencia de sensibilización en 203 pacientes con asma y/o rinitis con edades comprendidas entre los 10 a 60 años fue del 90,6% para 6 especies de ácaros del polvo doméstico; 55,7% para 33 especies de pólenes; 40,4% para 5 especies de hongos; y del 18,7% para dos clases de epitelios. Si consideramos la diferencia existente entre la sensibilización a alergenos netamente intradomiciliarios como son los ácaros del polvo doméstico (184/203) en comparación con los pólenes (113/203), alergenos extradomiciliarios por excelencia, la diferencia resulta altamente significativa (p<0,001).Al considerar particularmente la sensibilidad al Platanus hispanica (32/203) en relación con la del Dermatophagoides pteronyssinus (160/203), ácaro de la familia pyroglyphidae de mayor trascendencia mundial, la diferencia resulta más evidente (p<0,0001).En la ciudad de Buenos Aires, el análisis del contenido mensual de polen en la atmósfera durante un período anual completo, permitió identificar 77 variedades. Las mayores concentraciones polínicas se alcanzan a fines del invierno y durante la primavera, con un pico anual en octubre, cuya mayor parte proviene de la polinización de los árboles y arbustos cultivados (cipreses, fresnos, plátanos, arces, eucaliptos, moreras, palmeras, juncos, ligustros y diversas gramíneas). Un segundo pico anual de menor importancia se registra en marzo por la contribución principal de casuarinas, compuestas y quenopodiaceas. (7,8).La duración de polinización del Platanus hispanica es muy corta, oscilando entre 20 y 40 días (9), por lo que si la sintomatología respiratoria es debida a este polen, la misma puede ser efectivamente prevenida con medicación durante esa temporada.La queja habitual de individuos afectados de rinoconjuntivitis y/o asma bronquial, ocurre durante la época en que se desprenden los frutos, a menudo referidos como semillas, de este árbol (ver figura). Estos frutos están rodeados de diminutas y finas espículas que al ser llevadas por el viento impactan sobre la mucosa ya de por sí irritada de estos pacientes, desencadenándoles la sintomatología respiratoria. Los individuos no alérgicos también pueden manifestar síntomas, sobre todo, irritación conjuntival y/o nasal, debido a esta causa.Si se tiene en cuenta que los árboles representan el "pulmón del planeta" y que son uno de los elementos más importantes que se contraponen a los cambios que está experimentando el medioambiente debido a los factores arriba detallados y que los efectos adversos que provoca el Platanus hispanica si bien molestos, son transitorios y los más importantes pueden ser adecuadamente prevenidos, creemos que no justifica la eliminación de estos árboles. Dr. Ledit. R. ArdussoCoordinador del Comité de Alergenos, Pruebas diagnósticas e InmunoterapiaAsociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica Referencias1. Platts-Mills TAE, Wheatley LM, Aalberse RC. Indoor versus outdoor allergens in allergic repiratory disease. Curr Op Immunol 1998;10(6):634-6392. Platts-Mills TAE, Wheatley LM, Aalberse RC. Indoor versus outdoor allergens in allergic respiratory disease. Curr Opin Immunol 1998,10:634-393. Platts-Mills TA, Woodfolk JA, Chapman MD, Heymann PW. Changing concepts of allergic disease: the attempt to keep up with real changes in lifestyles. J Allergy Clin Immunol 1996;98(6 Pt 3):S297-S3064. Wickman M, Bylin G, Lindfors A, Strand V. Allergen exposure and pollutants of the indoor and outdoor environment – interaction in allergic disease. Progress in Allergy and Clinical Immunology Vol 4, 150-152. Oehling AK & Huerta López JG editores, Cancún, 19975. Martel J, Benhabib O, Grillo M, Testa M, Axenfeld J, Poiron J, Kohan M. XIX Jornadas Anuales Progresos en Alergia Asma e Inmunología, 19956. Ardusso L. Aeropalinología de la ciudad de Rosario y su relación con la sensibilización alérgica. Presentación preliminar. Curso de Post grado en Alergia e Inmunología. Rosario, Octubre de 1999.7. Romero EJ, Majas FD, Noetinger M. Polen aéreo en la ciudad de Buenos Aires. Arch Arg Alerg Inmunol Clin 1992;23:142-628. Noetinger M. Tres años de monitoreo de la lluvia polínica en la Ciudad de Buenos Aires. Arch Arg Alerg Inmunol Clin 1993;24:65-75 9. Ballestero LH; Monticelli JV. Polinosis. Librería Hachette S. A. Pag 120 AIRBORNE POLLEN AND ALLERGY IN THE RÍO NEGRO AND NEUQUÉN UPPER VALLEY, NORTH PATAGONIA: A PRELIMINARY APPROACH.L. Vega, M.M. Bianchi and G. NordestromADOS Hospital, Neuquén, Argentina. The Río Negro Upper Valley (39°S and 68°W, 242m above sea level), has a dry temperate climate, 15° C mean temperature, 56% relative humidity, 199 mm p.y. average rainfall, and strong winds (6 km-h p.y. av.).Vega (1) found in previous research a high rate of sensitisation to pollens in allergic patients. No research into airborne pollen has ever been conducted here before.Methods: Daily pollen identification and count from March 1996 to September 1997 were made at PROGEBA Bariloche, using a Burkard spore trap at INTA Alto Valle (8 m above street level) with standard techniques. At the same time, 180 outpatients with allergic disease attending the ADOS Hospital were prick-tested and their medical records incorporated onto PC data base (Epi-Info).Results: Patients:age(y):mean=19.62, SD=16, sex: 46.4 female, 53.6% male.91 allergic rhinitis, 15 asthma, 74 both. 40% were sensitised to Poaceae, 28.7% to Chenopodium, and 22.1% to Plantago. Seasonal allergic symptoms were present from August to April. There is no data for June, July and August (winter) because of technical problems. Monitoring shows Poaceae begins to pollinate in September, peaks in October, ends in April. Plantago begins in September, peaks in January, ends in May. Cheno-Ams begins in September, with peaks in September, February, March to end in May. Conclusions: Airborne pollens were monitored, and although winter data is lacking, findings are consistent with allergy symptoms suffered by patients. Poaceae, Cheno-ams and Plantago are the main pollen taxa in the region causing allergic sensitisation . Pollen season lasts from September to April-May. Further research is needed to refine this preliminary approach. | | | | TEODORICO HILDEBRANDT eljardin@rionegro.com.ar www.plantasymascotas.net | | | | | |