| | | | | | | | | NUEVOS TALENTOS | | La octava edición de la feria Puro Diseño reveló a los diseñadores emergentes, que renuevan los aires creativos de la Argentina. | | | | | | La diversidad de formas, texturas y colores en diseños de indumentaria, decoración, objetos, iluminación y accesorios vuelve a ser la estrella de la octava edición de la feria Puro Diseño, que abrió sus puertas en La Rural con la presencia de más de 270 expositores. A lo largo de 12.000 metros cuadrados de feria se puede encontrar un posa vasos con la imagen de Marylin Monroe a cinco pesos, una campera dorada con capucha para perritos a más de 50, un plato cuadrado blanco de cerámica a 19 y una lámpara de caireles y organza a 145 pesos. Son solo algunos ejemplos de los miles de objetos que se ofrecen en la feria, que a su vez significa la oportunidad, para muchos diseñadores, de llegar directamente al comprador durante los seis días consecutivos que dura el evento. Por eso es que cada espacio apela a la máxima creatividad, como el stand que exhibe la vajilla de Les Potiers, que simula un estudio de tevé con un gran reflector, o el living cool de muebles de jardín y enormes plantas de Importarte o las alfombras pintadas a mano como obras de arte, que ocupan todo FloorArt. En el ingreso a la feria se pueden encontrar los elegidos de “PuroInédito”, 20 objetos de edición limitada donde destaca, como uno de los más divertidos, “Enófeles”, una pequeña vaca en cuero, del alto de una mesita, cuyo lomo actúa de bandeja y con un gran espacio en la panza para guardar botellas de vino y copas que cuelgan de los costados. Acá también se puede encontrar una reposera de cuero y aluminio (Fernando Poggio), un tapado de chenille rayado con costuras superpuestas (Paula y Agustina Ricci), un sombrero de pelo de liebre moldeado en fieltro (Compañía de Sombreros) o ropa interior personalizada con fotos (Bienes Gananciales). Los colores se multiplican a cada paso, y en un stand, por ejemplo, se combinan los sombreros no tradicionales de Ves lo que es, con las carteras de Guadalupe Martiarena (Pe) que son reversibles, cambian de forma, se doblan, se acoplan y hasta se transforman en mochila. Resulta por lo menos curioso detenerse a observar los diseños de Canine Couture, que ofrece la más variada diversidad en prendas para mascotas, como remeritas de colores, camperitas, capitas, camisitas surfer, suéteres, correas, bolsos para llevarlos a pasear y hasta vestidito de novia con tules, sólo para entendidos. “Es la primera vez que participo de Puro Diseño” cuenta Milagros Núñez (de Teófila), quien expone “sólo collares” de vidrio, acrílico y mucho metal que oscilan entre los 50 y 150 pesos, de todos colores, en un stand de paredes rosa donde sobresale un maniquí del que cuelga un collar gigante, que llega hasta el suelo y por el que “todos preguntan”. La provincia de Tucumán participa de la feria con un amplio stand institucional de 90 metros cuadrados que agrupa a once diseñadores locales que van de los 25 a los 40 años, que pretenden representar las nuevas tendencias que se desarrollan en esa provincia. Como un artesano, el tucumano Diego Pont cuenta que corta las piedras y funde el metal de sus diseños en joyería, desde anillos hasta gargantillas, hecha en plata y con perlas naturales (desde 120 pesos) al igual que Patricia Nader, que realiza objetos de vitraux fusión y que compara sus trabajos con los del escultor (juegos de sushi y platos con guardas indígenas, desde 90). “La idea es darle un toque diferente al espacio con la iluminación, por eso diseñamos todo nosotras y trabajamos con las texturas y el material, como acrílico, vidrio, organza, mostacillos, empapelados”, cuentan Gabriela y Marisol de Iluminhadas, el espacio que ofrece coloridas lámparas desde 123 pesos en adelante. Se puede ver también las obras de arte de la galería Braque, que expone en la feria por primera vez con pinturas, óleos, acrílicos y esculturas de 14 artistas entre los 300 y los tres mil pesos, o las impactantes sillas de exclusivos diseños de Manifiesto Puro, que presenta los modelos más distintos de la historia del mobiliario del siglo XX, de gran atractivo visual. No falta la variedad en la vajilla de Les Potiers, con productos de eco cuero, cerámica y porcelana como tazas, platos, teteras, bowls, fuentes y porta-palillos, desde 3,50 pesos, los mates forrados en telas de colores andinos en el stand de Salta, divertidos pijamas para chicos con ojitos en Inocenza, o las remeras plateadas, doradas, con muchas lentejuelas y brillos de Ana Silveyra. Colaboró: Agustina Fourquet | | | | POR MERCEDES EZQUIAGA | | | | | |