Cada día se populariza más el uso de alarmas electrónicas para detección de intrusos, en casi todo tipo de viviendas, así como en comercios, oficinas, industrias.
Ajustadas a la realidad actual, las alarmas de hoy en día son mucho más inteligentes y sofisticadas, ya que en general se las instala de manera casi particularizada, por lo que se pueden seleccionar distintos niveles de equipo, algunos de ellos con características muy avanzadas que permiten hasta la detección remota del tipo de ilícito que se está cometiendo para tomar la decisión correcta y rápida para impedirlo en el tiempo real.
Esto es en el caso de los sistemas con monitoreo a distancia, que requieren una conexión con un centro de alarmas bien equipado con personal experto y experimentado. La conexión típica ha sido por muchos años la línea telefónica y ahora ha sido sustituido o complementado por radio, internet o celular, éste último utilizando el canal de GPRS.
La instalación de los sistemas de alarma contra intrusos ha contribuido a reducir la cantidad de robos en los hogares y comercios, presentando no sólo la ventaja directa de la seguridad que brinda a las personas y sus bienes; los robos también pueden causar diferentes trastornos psicológicos y físicos sobre las víctimas de estos hechos delictivos, siendo los más afectados las personas mayores y las que sufren problemas del corazón, las mujeres y sobre todo los niños, quienes pueden resultar muy traumatizados por la situación de peligro, según afirman los especialistas.
Como primera medida siempre es conveniente, si no se cuenta con algún sistema existente, consultar con más de un especialista en la materia para tener una visión de las posibilidades y las maneras a abordar el tema. Así se podrá contar con una evaluación técnica de la situación.
Luego, es importante que se estudie el plano de la casa con las distintas vías de accesos, las medianeras y la zona en la que está ubicada.
Por lo general los técnicos en la materia aconsejan establecer “áreas de seguridad”, a los efectos de determinar la conveniencia de proteger desde un principio todo el perímetro de la propiedad, la vivienda exclusivamente o algún sector en particular. En este último caso con puertas con algún blindaje sería suficiente.
Un “kit de alarma” cuenta básicamente con una central de monitoreo, sensor de movimiento, sensor de apertura de puertas, sirena y batería. A esto se le pueden incorporar otros elementos como cámaras y reproductores de imágenes por circuito cerrado, y además una gran variedad de servicios y productos adicionales como un discador para sistema de alarma, control remoto inteligente, sensores de microondas, detector por infrarrojos pasivos, barreras infrarrojas, cercas electrónicas, detección perimetral exterior o sensores de apertura de puertas.
El detector infrarrojo es un dispositivo muy importante ya que detecta los cambios de temperatura que se producen en un ambiente cuando hay un ser vivo. Están aquellos que ignoran a los animales domésticos de hasta 13 kilos, y tienen por lo general una cobertura radial de unos seis metros.
En tanto que las barreras infrarrojas son utilizadas para proteger perímetros de hasta 30 metros y cubrir puertas, portones, ventanas y balcones del ingreso de intrusos.
Son dos cilindros de unos 25 centímetros de largo que están especialmente preparados para ser colocados a la intemperie y tienen haces infrarrojos combinados.
Como cualquier disciplina, la seguridad también ha ido evolucionando y esto ha permitido que se fueran desarrollando métodos un tanto más ajustados a cada caso en particular.
En estos tiempos hay especialistas que sugieren la conveniencia no sólo de contar con un equipo electrónico convencional ajustado a cada caso en particular, sino además combinar este con la seguridad física para contar con un sistema de seguridad integral.

PARA TENER EN CUENTA

• CENTRAL DE ALARMA: Es el “cerebro” de todo el sistema de seguridad. Todos los sensores se conectan a ella. Pueden comunicarse con el exterior de dos maneras: con un discador automático o por el teléfono celular. Este último conviene más, ya que los ladrones suelen cortar la línea telefónica. Tiene que estar bien oculta en algún lugar de la casa.
• REJAS: Hoy en día se hace casi imprescindible enrejar todas las aberturas. Las mejores son de hierro macizo y de un grosor mínimo de 1,25 cm. La sección cuadrada es más resistente que las redondas, aunque en última instancia todas son vulnerables (se pueden doblar). Además de su función en favor de la seguridad las rejas antiguas prestan una buena vista y en ciertos casos, son tanto a más resistentes.
Las rejas se recomiendan para las casas, especialmente las que lindan con terrenos baldíos. Se aconseja que tengan no menos de 1,80 metros de altura y que terminen en punta de lanza.
• PORTÓN AUTOMÁTICO: Cualquier puerta o portón, de madera o de hierro, se puede automatizar. El sistema puede ser electromecánico o electrohidráulico para abrir portones corredizos, levadizos o batientes. Si es a control remoto, puede tener interferencias en otros artefactos eléctricos. Lo mejor es la apertura con llave y botón, que evita que el portón se abra solo.
• VIDRIOS TEMPLADOS: Resisten golpes muy duros, si se rompen estallan pero no se caen ni dejan astillas. Son sometidos a un proceso de templado, por lo que tardan 7 a 10 días en entregarlos. El espesor mínimo es de 10 milímetros, y se puede templar un vidrio ya existente.
• TRABA DE SEGURIDAD: Es conveniente colocar en la puerta una traba que permita entornarla para recibir un sobre, un paquete pequeño o un telegrama, sin tener que abrirla totalmente. Son muy económicas y constituyen una medida de seguridad básica. Eso sí, el marco de la puerta debe ser muy resistente para evitar empujones.
• PUERTA BLINDADA: Son inviolables: resisten cualquier golpe fuerte y sus cerraduras son “antiganzúas”. Hay de 2, 3 ó 4 trabas (sistema multipunto), según el tipo de abertura.
Hay distintos tipos de blindaje. En 3 horas se puede blindar la puerta existente con chapa de hierro y cerradura multipunto de 4 pernos. Esto resulta entre un 50 y un 70% más económico que comprarla ya blindada.
• TOUCH MEMORY: Un sistema novedoso que evita las llaves. Es una pastilla blindada de acero inoxidable que se apoya sobre un lector y abre las cerraduras. Tiene el tamaño de una moneda de 10 centavos y contiene un microcircuito grabado en forma indeleble con un código único e inviolable.
• LUCES EXTERIORES: Se pueden programar para que se enciendan y apaguen todos los días a determinadas horas, simulando la presencia de los dueños de casa. El sistema se denomina "temporizador".
• SENSORES EXTERIORES: Se colocan formando una barrera fotoeléctrica horizontal (invisible) de 2 o más haces. Cuando el intruso la atraviesa, suena la alarma. Se puede ajustar a distintas alturas, y como son “inteligentes” no se activan ante un perro, una hoja que cae, tormentas, etc. Los sensores se pueden ocultar en el jardín, camuflados, entre árboles o plantas.
• SENSORES INTERIORES: Hay de varios tipos: infrarrojos, térmicos, de movimiento. Se estudia cada caso en particular para colocarlos en la forma más conveniente, sin que se afecte el normal funcionamiento de la casa.
• SENSORES MULTIDIRECCIONALES: Abarcan un gran espectro en forma de pirámide. Sus haces infrarrojos van desde el centro del techo hasta cubrir todo el piso. Se colocan generalmente en pasillos o escaleras, lugares de acceso a otros cuartos.
• SENSORES DE VENTANAS: Algunos especialistas no creen en su efectividad. Dependiendo del sistema, se pueden activar ante una tormenta eléctrica, cambios de temperatura, etc. Las ventanas deben estar cerradas y no se pueden “ventilar”. Además, los ladrones no suelen “abrir” la ventana sino “romper el vidrio” y si son sensores “de contacto”, no registran el ingreso del intruso.
• CAMPANA O SIRENA DE ALARMA: Tiene un sonido muy potente o ultraagudo, que sirve para disuadir a los ladrones y alertar a los vecinos. Son preferibles las autoalimentadas, que no dejan de sonar por más que las arranquen. Al mismo tiempo que suena la sirena, el sistema puede alertar telefónicamente a la policía, un familiar, etc., que la apagará con un código especial.
• LUZ DE ALARMA: Funciona como una sirena, emitiendo señales destellantes que alertan a los vecinos. Puede tener incorporado también el sonido y ser autosuficientes, es decir que no se cortan aunque cierren la llave de luz.
• PERSIANAS ANTIRROBO: Son de aluminio, enrollables, rellenas con espuma de poliuretano y se activan manualmente o con motor. Tienen caras curvas o rectas, son mucho más resistentes que las de madera y tienen herrajes en el zócalo para que no se puedan levantar del lado de afuera.

SIN REJAS

La arquitectura actual tiende, paradojalmente, a la utilización muchas veces de grandes ventanales como una forma de lograr una mayor luminosidad, con el adicional de tener una presencia visual más interesante sobre los espacios abiertos que rodean la casa como parques o jardines. De esta manera se generan sectores de la vivienda por donde la seguridad tenía puntos flojos; para ello los arquitectos recurren cada vez más a los vidrios laminados ya que por su conformación técnica brindan seguridad contra robos sin necesidad de rejas y protegen de desprendimientos por roturas.
También filtran los rayos solares UV y ofrecen aislación acústica.
Esta clase de vidrios consisten en la unión de dos o más capas intercaladas con una o más láminas de PVB (polivinil burital). Un proceso industrial logra una sociedad entre las características del vidrio, su transparencia y cualidades ópticas y las del PVB: elasticidad y resistencia a los impactos y al desgarro, sin alterar la transparencia.
Los vidrios laminados logran una excelente barrera de protección contra roturas, y además, actúan como un elemento de seguridad antirrobo: resulta difícil traspasar la lámina de vidrio de ventanas y puertas.
Los otros vidrios que se utilizan para seguridad son el templado, el termoendurecido y el armado, que tienen componentes y fabricación muy diferentes entre sí.
Ahora bien, la mayoría de los vidrios parecen iguales: las diferencias aparecen cuando se rompen.
El vidrio templado tiene buena resistencia mecánica, por eso se usa en puertas de vidrio sin marco. Pero si se rompe, se desintegra en pequeños fragmentos que, si bien no causan heridas cortantes, tampoco permanecen en su posición. Los vidrios armados tienen una malla de acero en su interior, que no los hace más fuertes, pero en caso de rotura actúa como soporte temporario. Estéticamente hablando, pierden transparencia.
El vidrio laminado tiene otras cualidades: la aislación acústica de la lámina de PVB y la protección frente a los rayos UV, ya que absorbe el 99,5 % de esos rayos, e impide la decoloración de cortinas y tapizados.