Para la pintura de materiales a la vista de barro cocido, como los ladrillos, ladrillones o tejas, hay en el mercado diferentes productos que permiten acabados variados y protecciones para estas superficies.
Entre estos existen tres grupos principales y que tienen que ver con la conformación de su estructura química: los recubrimientos acrílicos, los impregnantes sintéticos y los protectores siliconados.
En el primer caso están los recubrimientos acrílicos de base acuosa, productos que forman una película elástica y transparente, con ligero brillo que impide el ingreso del agua y sella las micro-fisuras tan frecuentes en el encuentro entre las juntas y los ladrillos.
Preparados al agua, de aspecto lechoso, dejan al secar una película cerrada y transparente a diferencia de los impregnantes. Queda formada así una barrera impermeable. No se recomienda dar mas de dos manos ya que la película comienza a blanquearse.
 Estos productos pueden aplicarse también sobre tejas, cerámicas no esmaltadas y superficies porosas en general, en exteriores ó interiores. Los bloques de cemento pueden necesitar un tratamiento adicional. En todos los casos, se recomienda una limpieza previa con ácido muriático rebajado con dos ó tres partes de agua. Si hubiera moho ó verdín, hay que cepillarlos con lavandina al 20 por ciento en agua.
Los fabricantes y especialistas recomiendan asegurarse que la superficie esté seca al momento de su aplicación, y que las condiciones ambientales sean las adecuadas, como por ejemplo, temperaturas mayores a los 10 grados y humedad ambiente menor al 85 por ciento.
Luego están los impregnantes sintéticos que impermeabilizan la superficie y le otorgan color en un solo paso.
Se debe tener en cuenta que también tiñen las juntas y que por ser de origen sintético, son atacados por la alcalinidad y por el ablandamiento de la pintura por la alcalinidad, lo que también se denomina “saponificación”.
Por lo tanto es necesario verificar que la pared no sea alcalina y no retenga humedad.
El tercer grupo de productos es el de los protectores siliconados, que no afectan estéticamente la superficie. Una vez aplicado con la cantidad de manos correspondientes prácticamente no dejan visualmente demasiadas variaciones con respecto a la imagen anterior de la pared tratada. Además generan un proceso de hidro-repelencia que asegura la impermeabilidad y permiten la evaporación del agua retenida.
La elección de alguno de estos materiales para recubrir tejas, ladrillos o ladrillones, deberá ser realizada con el correspondiente asesoramiento técnico a los efectos de aplicar el producto adecuado para cada caso en particular.

LAVAR CON POCA AGUA

Antes de aplicar alguno de los productos mencionados en estas notas hay que realizar una corrección de la falla que diera origen a la patología y a la limpieza de la superficie que se procede a tratar.
Hasta aquí los diferentes especialistas se ponen de acuerdo
en esto, pero donde no se ponen de acuerdo algunos expertos en temas relacionados con problemas en las construcciones es en el porcentaje de uso del tradicional ácido muriático, tan presente en el mercado desde hace ya largo tiempo.
Por ejemplo, hay quienes sostienen que las manchas blanquecinas producto de las sales que contienen los ladrillos y las mezclas que son utilizadas en la elaboración de la pared pueden ser removidas con ácido muriático en una proporción de 1 a 10 partes, lavando con la mínima cantidad de agua para no rehumectar el muro.

COLORIN COLORADO

“Plavicon acrílico”, es un impermeabilizante acrílico de base acuosa, semimate para ladrillos y tejas. Sirve como fijador para posteriores pintados, y se aplica sobre muros de ladrillos vistos, lajas, tejas, piedra, con pincel, rodillo o soplete.

Se diluye con agua

“Sellagrés” es un protector de ladrillos, tejas y cerámicos no esmaltados, totalmente transparente. Repele el agua del interior y del exterior. Debe diluirse con medio litro de agua por cada litro de producto y tiene un tiempo de secado de 24 horas entre cada aplicación.
 “Recuplast ladrillos” es un recubrimiento plástico que impermeabiliza las superficies y las protege de suciedad, hongos, manchas, etc.
Tiene una terminación ligeramente satinada y se puede aplicar sobre ladrillos, piedras naturales o artificiales, tejas y cemento, tanto en interior como en paredes exteriores. El tiempo de secado entre cada mano de aplicación del producto es de aproximadamente 8 horas según sus fabricantes.
“Plavicon ladrillos base solvente” es un impermeabilizante para ladrillos y tejas. No da brillo, y se puede aplicar sobre ladrillos vista, tejas, hormigón visto, revoques a la cal, piedras naturales, premoldeados. Se aplica con pincel, rodillo, soplete o chorreado descendente a baja presión. No se recomienda la aplicación sobre pinturas al látex, barnices o lacas, ni superficies horizontales.
“Ladrillos protector siliconado” es un producto hidrorrepelente que no forma película y protege los ladrillos del agua y la suciedad. Es impermeable pero permite la eliminación de la humedad interna. Se aplica sobre ladrillos, piedras naturales o artificiales, tejas y cemento.
Se aplica con rodillo, pincel o soplete, y se diluye con aguarrás de primera calidad. Tiene un color incoloro transparente que no forma película, y su tiempo de secado entre manos es el mínimo ya que se aplica en 2 manos húmedo sobre húmedo.
“Ladrillos impregnante sintético”, es un producto transparente cuya película elástica y semiporosa protege los ladrillos y mantiene su aspecto rústico. Es impermeable al agua pero permite la eliminación de la humedad interna. Tiene un acabado satinado, y protege especialmente ladrillos de exterior ya que contiene fungicidas y pigmentos resistentes a los rayos UV. Se diluye con aguarrás de primera calidad, y el tiempo de secado entre manos es de 24 horas aproximadamente.
“Petrilac ladrillos” es un protector hidrorrepelente para ladrillos vistos, que se aplica sobre ladrillos vista, cerámicos no esmaltados, o tejas con pincel. Se diluye con aguarrás.
El tiempo de secado entre manos, es de 24 horas y el secado final se calcula en 48 horas.
“Suvinil ladrillos y tejas” es un protector hidrorrepelente para superficies exteriores e interiores de ladrillo, tejas de barro cocido, cerámicos no vitrificados, piedras naturales y artificiales, fibrocemento, hormigón y revoque. Se aplica con pincel o pinceleta, y se diluye con Suvinil diluyente. El tiempo de secado entre manos, es de 30 minutos y el final de 24horas.
“Colorín ladrillos” es un protector para ladrillos vistos, tejas y cerámicos no esmaltados. Se aplica tanto en exteriores como en interiores, a pincel o soplete. Se diluye con aguarrás mineral de primera calidad. Su tempo de secado es de 24 horas entre manos.

Fuentes: Plavicon/Suvinil/Colorin/
Petrilac/Recuplast

PREVIAMENTE

Entre los orígenes más habituales en la aparición de manchas blanquecinas está el ingreso de agua a la pared y el arrastre de sales solubles desde su interior hacia la superficie, produciendo la aparición de estas eflorescencias alcalinas o salitre.
Si bien estos procesos se pueden dar también en paredes revocadas o revestidas, en aquellas de mampostería a la vista tienen una mayor presencia por el contraste del color del ladrillo.
Antes de la elección de algún producto protector de la pared, hay que verificar la causa del ingreso del agua a la misma, ya que puede tener un origen en particular o la combinación de algunos como grietas, fisuras, mala ejecución, o simplemente la pérdida de la propiedades aislantes de alguna de sus partes específicas como por ejemplo las capas aisladoras.

La “lluvia ácida”

Otra de las causas de patologías en las paredes de ladrillos a la vista es la destrucción de los ladrillos por parte de la “lluvia ácida”, que es producto de la combinación del bióxido de carbono con el agua ambiental o de lluvia.
Los ácidos atacan los componentes alcalinos de las paredes de ladrillos a la vista formando bicarbonatos y sulfatos.
Estos son solubles en agua por lo que al reiterarse estos ataques terminan destruyendo las piezas que componen la pared.