La orientación y protección exterior de las paredes, la altura de los techos, el número de habitaciones que se desea refrigerar, y las características de cada una de ellas son cuestiones determinantes para saber elegir el aparato o sistema más adecuado.
En pleno verano la temperatura interior de la casa puede rondar hasta los 30 grados, lejos de los 18 a 20 grados que los especialistas señalan como ideales.
Para la elección del equipo de acondicionamiento del aire, como primera medida se debe definir si se va a climatizar alguna habitación, varias o toda la casa. En este último caso habrá dos opciones: elegir un equipo reversible o instalar un sistema de aire por conducción o instalación centralizada.
El primer caso es el más común ya que permite disponer de aire acondicionado en verano y calefacción en invierno. Pero si ya tenemos calefacción, resultará más rentable un sistema por conducción.
Para acondicionar una o varias habitaciones es preferible optar por un equipo split o multisplit.
El inconveniente es que el aparato interior queda a la vista, aunque cada vez se fabrican diseños más pequeños y atractivos.
Para no equivocarse y tener un buen rendimiento del aire acondicionado ahorrando energía se debe acertar la potencia que necesita el espacio a climatizar.
Además de tener en cuenta los metros cuadrados de superficie hay que considerar las alturas de los cielorrasos, la orientación de la casa (ya que la incidencia del sol es muy importante como se señala aparte), la calidad y el tipo de los revestimientos, y sobre todo, el número de ventanas y sus dimensiones, ya que el vidrio se calienta y rápidamente transmite la temperatura exterior que en esta época es más alta afuera.
Teniendo en cuenta las características mencionadas se podría decir que en general existen algunos parámetros que tendrán que adaptarse a la situación particular de cada casa.
Hay técnicos que aconsejan que por cada metro cuadrado construido se calculen de 80 a 110 frigorías.
Si en una casa de 100 metros cuadrados se van a refrigerar 85 útiles, un acondicionador de 6.800 frigorías es, en un principio, aceptable. Hay que evaluar de acuerdo a las características antes comentadas si esto es finalmente suficiente.
También hay quienes de manera más genérica sostienen que lo más habitual es climatizar una habitación de entre 12 y 14 metros cuadrados con un equipo split de 1.500 frigorías. La potencia debe aumentar a 2.000 frigorías a partir de los 20 metros cubiertos y a 4.500 si se trata de un ambiente de hasta 40 metros cuadrados.
Fuentes consultadas:
Ing. Miguel Francisco Alvarez y Departamentos Técnicos de BGH Silent Air/Electra Argentina