| | s un arbusto de flor espectacular y realmente no me explico por qué no se lo planta más en nuestra región del Alto Valle. Realmente se lo ve muy poco, a pesar de que me parece ideal para adornar jardines delanteros y lucirse ... al menos para dar envidia a la vecina.
Será tal vez porque, al verla tan espectacular, muchos crean que es una planta “difícil” o porque en los viveros revendedores de la zona no la traen porque la gente no la pide y la gente no la pide porque ellos no la ofrecen ... un círculo vicioso que se repite con muchas otras plantas. UN POCO DE HISTORIA Su nombre técnico es Magnolia soulangeana y es una de las tantas magnolias de hoja caduca que se conocen en el mundo, algunas de las cuales se aclimatan muy bien en nuestro Alto Valle y presumo que también en toda la Patagonia, porque es absolutamente resistente al frío
La gran curiosidad botánica de esta planta, es que se trata de un híbrido creado por el hombre en el año 1820 en el parque de Soulange-Bodin (Francia, supongo) a raíz de un cruzamiento entre la Magnolia denudata (llamada “magnolia Yulan”) de la China, por Magnolia liliiflora (“magnolia purpurea”), también de esa región asiática. Esto que a usted le parecerá una simple curiosidad, a mí me explica algunas cosas que hasta hace poco no entendía ... y hago un poco de historia, si me lo permite.
En la década del 70 vi por primera vez a este bellísimo arbusto en plena flor ... es el mismo que le mostramos hoy, treinta años después, plantado en Buenos Aires casi Mitre, de Roca. Obviamente, me enamoré de él a primera vista.
Coincidió que se me pidió que adornara un poco los canteros y la franja de césped frente a este diario y lo primero en que pensé fue en “ella”.
Tras mucho investigar (en los viveros no la conocían y no había Internet), la encontré pero, para mi desilusión, las indicaciones de cultivo decían lacónicamente: “Para sitios a media sombra y reparados del viento”. ¡Chocolate! Cómo hacía yo para plantarla en esos canteros ubicados al rayo del sol y donde azota de lo lindo el viento.
Soy de la región alemana de Sajonia (Sachsen) y los sajones somos famosos por esos lares por lo testarudos (codo a codo con los vascos, a los que admiro). De modo que dije “la quiero” y planté dos ejemplares, comprados por correspondencia en un vivero de Pilar, Buenos Aires, a un viverista yugoslavo, ya desaparecido, de quien me hice amigo y quien me enseñó muchos secretitos.
Por las dudas, compré tres y planté una en mi pequeño jardín de entonces, con todas “las de la ley” ... media sombra, humedad y reparo. ¿Resultado? la mía vivió tres años y jamás floreció ... las de frente al diario, plantadas en el 77, florecieron profusamente hasta hace algunos años, en que la falta de riego las mató. Ergo ... no crea en todo lo que dicen los libros. Experimente y sea vasco. UNA ANTES Y OTRA DESPUES Pero otra cosa interesante. La floración de esas dos magnolias purpúreas, casi todos los años coincidía con el aniversario de Roca, el 1 de setiembre, así como otras que después he plantado, siempre originarias de mi amigo yugoslavo.
Pero hete aquí que la “madre de todas las magnolias”, la que desencadenó toda esta historia, florece 15 días antes. La pregunta que me hacía era si eso era motivado porque estaba reparada del viento ... al menos más que las de los canteros sobre Nueve de Julio, frente a este diario.
Ahora se me despejó la incógnita. La que primero florece es Magnolia soulangeana, aproximadamente a mediados de agosto y luego lo hace Magnolia liliiflora, que en los viveros se ofrece como Magnolia soulangeana liliiflora, alrededor del 1 de setiembre, según el año, pues la que tengo en casa, rescatada de gajo herbáceo, aún está en veremos.
Lo realmente espectacular es que sus grandes flores aparecen mucho antes que las hojas, que recién lo hacen tímidamente cuando comienzan a caer los pétalos de las que abrieron primero. Además es sumamente sana y hasta resiste algunos olvidos de riego.
Hay una variedad de flor blanca, llamada 'Lennéi Alba', pero si la consigue en nuestro país me avisa.
No se le ocurra podarla, pues no lo necesita. A lo sumo, en octubre o noviembre, elimine sólo las ramas secas y no toque el resto, porque si lo hace, puede interrumpir la formación invernal de yemas florales por muchos años y hasta puede morir.
Si no le aburrió esta historia y quiere tenerla en el frente de su casa, déle mucho sol, buen drenaje y agua ... aparte de buena onda, claro.
Teodorico Hildebrandt
eljardin@rionegro.com.ar Fuente: http://de.wikipedia.org/wiki/Tulpen-Magnolie LOS PROGENITORES Aquí las dos progenitoras de lo que aquí en nuestro país se ofrece como Magnolia soulangeana liliiflora. La blanca es la denudata (magnolia Yulan) y la roja la liliiflora. Teóricamente, entonces se debería conseguir el híbrido de color blanco ... si es brujo y lo logra, me avisa. |
