A una adecuada elección de los materiales para la cubierta, le debe seguir una correcta ejecución de los trabajos, teniendo en cuenta que las funciones que debe cumplir un techo involucran su aislación de factores como cambios de temperaturas, presencia de agua o vientos intensos. Cuando en las cubiertas de una edificación, sean éstas de chapas, tejas o losa, se presentan filtraciones lo que más se recomienda, antes de elegir una membrana impermeable, es realizar una evaluación del origen de las mismas. Cada vez más se conoce cómo se puede reparar un techo con los nuevos materiales que hay disponibles, pero para evitar esto más vale prevenir que curar: resulta fundamental una correcta colocación de los materiales aislantes durante el proceso de ejecución de la cubierta. En techos inclinados o planos son indispensables tanto el aislamiento hidrófugo, es decir evitar el paso del agua, como la aislación térmica y acústica. Una membrana para techos es una lámina de varias capas, compuesta por distintos tipos y proporciones de materias primas, según el destino y el espesor deseado. A simple vista todas pueden parecer iguales porque tienen asfalto, polietileno o aluminio, pero hay diferencias muy notorias entre ellas. A los materiales básicos con los que se fabrican prácticamente todas se agrega también la malla geo-textil, que es una trama sintética no tejida de alta resistencia, que se usa para la fabricación de membranas transitables. En función del material y según los diferentes usos en el mercado nos encontramos con membranas "aluminizadas" para azoteas no transitables, "normales" para colocar debajo de baldosas, "membrana geo-textil" para cubiertas transitables con terminación en colores, "mineralizada" para lugares transitables y con alma de fibra de vidrio y una película granítica y finalmente "espumadas", que tienen en su composición asfalto modificado, polietileno, espuma térmica y una lámina reflejante. ADHERENCIA Para colocar una membrana impermeable hay que limpiar previamente la superficie de la cubierta, que debe estar seca y libre de polvillo. Luego se coloca un producto imprimante sobre toda el área del techo, además de las partes que sobresalgan; se deja secar y se limpia nuevamente antes de colocar la membrana. La colocación se debe comenzar en la parte más baja de la superficie en sentido perpendicular a la pendiente, debiéndose calentar la membrana con un soplete, fundiendo el polietileno y superficialmente el asfalto. La adherencia se producirá con una suave presión manual. Cada paño de material se colocará superponiendo un solapado no inferior a los 8 centímetros y entre los finales de cada rollo se superpondrán unos 15 centímetros, según las sugerencias de los fabricantes de membranas para techos. Por último se deberá realizar un "embabetado" en los salientes laterales, los conductos de ventilación o chimeneas con doble membrana para tener una mayor seguridad. Para un cálculo del material los especialistas estiman que en un techo plano, a la superficie del mismo conviene agregarle de un 10 a un 12 por ciento para realizar las tareas de solapado y babetas, en tanto que para uno de chapas onduladas el incremento sería el doble del mencionado. NOVEDADES Megaflex SA lanzó al mercado un nuevo producto impermeabilizante preparado para el alto tránsito: Emultrans. Compuesto por resinas, emulgentes acuosos y fibras, puede aplicarse sobre cualquier superficie. Consiste en un "emulsionante acrílico de base acuosa concebido especialmente para alto tránsito aplicable sobre cualquier tipo de superficie que amerite la utilización de un producto impermeabilizante. Actúa como barrera impermeable mediante una gruesa capa fibrosa de alta resistencia mecánica de fácil aplicación y de excelentes prestaciones. Por su composición química constituye una masa impermeable hasta 3 veces mayor que la lograda con una pintura tradicional", según afirman sus fabricantes. TECHOS CALIENTES Con la aparición en los últimos años de las membranas asfálticas, se ha logrado crear una barrera impermeable efectiva, desplazando los trabajos de ejecución de los "techos en caliente", disminuyendo además costos y tiempo. Dentro de los tipos de membranas asfálticas se encuentran las sin cobertura de aluminio (no transitables), con cobertura de aluminio (no transitables), y con cobertura mineralizada (transitables). HUMEDAD EN PISOS El agua de condensación sobre la superficie de los pisos, se debe casi exclusivamente a una incorrecta ejecución de contrapisos, por la falta de implementación de métodos complementarios. La humedad natural del suelo asciende por capilaridad del contrapiso realizado directamente sobre el terreno natural. La implementación de una barrera de vapor, como lo es una lámina de polietileno sobre el suelo y bajo el contrapiso a ejecutar, impediría el ascenso de humedad por capilaridad, obteniendo de ese modo un contrapiso seco. Existen otros métodos, como por ejemplo la ejecución de cámaras de aire que pueden resultar más costosas. SISTEMA IMPERMEABLE A través de la historia de la construcción tradicional, la impermeabilización se resolvió con materiales que aporten la capacidad de impermeabilidad, es decir no permitir el paso de fluidos, pero también que posean características de resistencia, para permanecer como protección, y de flexibilidad para adaptarse a los diferentes movimientos del sustrato que lo soporta. El material que encontró el mercado de la construcción, que cumple con estas propiedades, es el asfalto. Se obtiene como subproducto de la destilación del petróleo y tiene las características de ser ligante, rápidamente adhesivo, impermeable, durable y accesible, condiciones imprescindibles e inmejorables para su implementación dentro de cualquier obra de construcción. Anteriormente en la edificación tradicional se realizaban techados asfálticos in-situ, es decir en la obra misma. Pero existían patologías debido a la utilización de asfaltos de mala performance. Estos no se adaptaban de la misma manera a diferentes contextos, climas, obras, etc. Además de presentar mayores costos y trabajos menos precisos, por realizar impermeabilizaciones con asfaltos en caliente, generando 7 a 10 capas formadas por asfalto y velo de vidrio. Los especialistas afirman que es un error muy común creer que la impermeabilización se resuelve con un producto, ya que lo correcto y seguro es considerar un sistema de impermeabilización, compuesto por el uso de imprimantes asfálticos compatibles y elegidos según el sustrato a impermeabilizar, una membrana asfáltica adecuada según la función y uso que cumpla la obra o espacio a materializar, y el acabado final o revestimiento sobre el producto impermeable. |