Hacia fines de la semana pasada todo indicaba que el mercado bursátil ingresaba en un punto sin retorno.
Sin embargo el martes, por la tarde del hemisferio norte, el Banco Central Europeo (BCE) comenzó a emitir algunas señales positivas y generó un importante giro en el ánimo de las plazas mundiales.
El BCE mantuvo la tasa al 1%, dio la orden para comprar bonos de los países en crisis (Portugal e Irlanda) y garantizó a los bancos europeos liquidez ilimitada para asistirlos en caso de alguna corrida especulativa.
Las bolsas de todo el mundo interpretaron el mensaje: en 48 horas (miércoles y jueves) hubo subas en promedio del 5% en las principales plazas mundiales y los operadores volvieron a las acciones en busca de un mayor recorrido de ganancias.
El Merval mantuvo la misma tendencia y los bancos volvieron a liderar las subas interdiarias del panel local.
Adicionalmente, Goldman Sachs divulgó esta semana sus perspectivas sobre el mercado accionario y adelantó que los papeles del sector bancario tendrán un buen desarrollo, por lo que recomendó comprar JP Morgan, Citi y Bank of America (cuestionado dentro de los informes de WikiLeaks).
Pero hay algunas dudas sobre el verdadero poderío del plan de compra de bonos de Europa. Conocido como "Doctor Doom", Nouriel Roubini -el profesor de la Universidad de Nueva York- dijo esta semana que Europa no tiene recursos para rescatar a países como España en caso de que los problemas de deuda de la región empeoren. "El contagio de Portugal ya se ha producido. Si el contagio se volviera más grave de lo que ya es en lugares como España, entonces habría problemas porque los recursos oficiales actuales no son suficientes para rescatar a España después de los más pequeños", aseguró a los medios. Sea como fuere, para muchos analistas parte de la suerte de los mercados quedará echada antes de fin de año.