La oferta de crédito hipotecario de un país en desarrollo, como así también su nivel de otorgamiento, destaca la importancia de la política habitacional y de las posibilidades de ascenso social que existen en esa economía. Cuanto más altos sean la oferta de crédito y el acceso de esos fondos por parte de la población, mayor será también su contribución a una mejor distribución de la riqueza.
Un informe realizado por la consultora privada abeceb.com destaca que Argentina quedó rezagada respecto de la oferta de créditos hipotecarios para el análisis del período 2003-2010, comparado con sus pares Chile y Brasil.
Y esto queda en evidencia si tomamos como indicador la proporción que representa el monto total otorgado en relación al PBI de cada país. Como se puede apreciar en el infograma que acompaña la nota, la evolución del indicador para Argentina muestra un marcado estancamiento para el período de análisis, no superando el 1%, según el informe citado. Sin embargo la tendencia de Brasil como de Chile desde el 2003 al 2010 es al alza, alcanzando valores mayores a los observados en nuestra economía.
El mismo informe de la consultora privada destaca que el otorgamiento de créditos hipotecarios en Brasil en la actualidad supera los niveles del 3% en proporción a su PBI, con una marcada tendencia alcista desde julio del 2008, momento en que se separa de la tendencia amesetada de la evolución argentina. Desde julio del 2008 a julio del 2010 el indicador brasileño alcanzó un aumento del 84%. Esta política acompaña el importante proceso que llevó a cabo ese país en los últimos años respecto del ascenso social que experimentó. La política de Luiz Inácio Lula Da Silva permitió reducir la pobreza de 35 a 22% entre el 2003 y el 2009 y sumó 31 millones de habitantes a la clase media, casi 15% de su población.
Chile, por su parte, presenta una proporción de más del 7% el otorgamiento de crédito hipotecario respecto de su PBI, el más alto de los tres países durante todo el período analizado.
La situación nacional
El informe realizado por abeceb.com destaca que las "principales causas del bajo desarrollo de largo plazo en Argentina obedecen a la alta inflación y el cortoplacismo de los depósitos".
Por un lado se puede observar que los cada vez más altos niveles de inflación registrados en nuestra economía derivan los fondos que sería propensos a ser depositados en plazos fijos a largo plazo a consumo de bienes durables o a depósitos de corto plazo. Las entidades financieras responden a este comportamiento ofreciendo préstamos hipotecarios también a plazos considerablemente cortos, que en el mejor de los casos alcanzan los 10 años. Por el lado de las tasas, el informe destaca que el costo de cubrir una eventual devaluación genera tasas prohibitivas para el demandante de crédito.
Respecto de los bancos públicos, los mismos ofrecieron líneas de crédito para viviendas a tasas fijas en pesos que resultaron interesantes para la clase media. Existieron líneas importantes que involucraron al Banco Nación y al Banco Hipotecario y que el gobierno nacional promocionó como grandes políticas habitacionales. Sin embargo los requisitos para su acceso exigían un nivel de salario familiar que dejaba afuera a la mayoría de los asalariados y que estuvieron muy lejos de ofrecer una respuesta efectiva a la problemática .
Mientras la política nacional fomente alta inflación y poca estabilidad económica, el mercado hipotecario seguirá estando lejos de profundizarse, al igual que el sueño de la casa propia de los que todavía no accedieron. Los asalariados seguirán inclinándose al consumo de bienes durables más que al de inmuebles y las entidades financieras a ofrecer financiamiento de corto plazo para captar ese consumo. (Redacción Central)