La recuperación de la actividad económica en la primera mitad del año se hace sentir con el fuerte crecimiento de la demanda de bienes de consumo que permite, asimismo, una cobertura de los efectos inflacionarios.

Este escenario estuvo acompañado por una importante oferta de crédito a corto plazo por parte de las entidades bancarias. Las tarjetas de crédito y los préstamos personales a sola firma son las opciones más destacadas para realizar la compra a 12 meses sin interés.

En este contexto, la inquietud del consumidor es saber qué opción es más conveniente: si "tarjetear" o perder unas horas en el banco para conseguir un préstamo personal a una tasa atractiva.

Un estudio a nivel nacional publicado por Zonabancos.com muestra que la primera opción termita siendo la más práctica y conveniente.

Veamos.

La desventaja del uso de la tarjeta se presentaría en los límites de compra y en los saldos que podrían arrastrarse de períodos anteriores. Y es por esta causa que los bancos comerciales elevaron los niveles de estas variables. Según "El Cronista", la extensión del límite alcanza hasta el 40%, llegando a un monto promedio de 4.000 pesos de crédito por tarjeta de crédito, aunque la opción para los de mayores ingresos superaría los 20.000 pesos. Esta decisión, que implementó la gran mayoría de los bancos, se condice también con los aumentos de precios que se hacen presentes mes a mes.

Del comparativo entre el uso de tarjetas de crédito y de préstamos personales (ver infografía) se deduce que el costo financiero total (CFT= tasa más gastos) de la primera opción se encuentra entre un 36 y un 54%, mientras que en la segunda, para un plan sueldo, se sitúa entre el 39 y el 70%.

El Banco Macro y el Nación son los que ofrecen mejores condiciones para el préstamo personal, al que el costo con tarjeta de crédito supera en 3 y 7 puntos porcentuales. Pero en el resto de las entidades financieras el préstamo personal no resulta conveniente al consumidor ya que existe una diferencia en el CFT de entre 12 y 25 puntos más respecto de la tarjeta.

Para el caso del plástico, el Banco Ciudad y el Nación son las dos entidades que mejores tasas ofrecen, con CFT que no superan el 37%, mientras que los bancos Francés y Galicia son los más caros, con CFT que superan el 52%. Los bienes más elegidos para comprar con financiamiento son los televisores LCD con motivo del Mundial, notebooks, bienes que componen el rubro tecnología y aquellos que hacen a la refacción del hogar.

El estudio remarca también que los montos de los créditos personales concedidos, en promedio, son relativamente pequeños: el 40% de los otorgados no supera los 15.000 pesos.

Las perspectivas para lo que resta del año señalan que mientras las tasas persistan en los actuales niveles, los salarios sigan ajustándose y la inflación no ceda, la situación se mantendrá y el consumo seguirá su tendencia creciente.

(Redacción Central)