Uno de los puntos más importantes para su análisis, que muestra el presupuesto 2010, es el ítem de los fondos destinados a la obra pública.
Allí se observa que el gobierno provincial proyectó gastos de capital por cerca de 1.750 millones de pesos para todo el año.
Dentro de este rubro encontramos el ítem "inversión real directa" estimada en algo más de 1.210 millones de pesos, fondos pensados para obras y equipamiento.
De los 960 millones asignados a la partida de "Obras", a la fecha, sólo se ha ejecutado un importe de 120 millones, es decir, apenas un 12% de lo presupuestado. Para tener una idea de los desvíos que estamos mencionando, tomando en cuenta los primeros cinco meses del año, el gobierno debería haber erogado por esta partida unos 400 millones de pesos. Es decir, que el presupuesto, sólo en este ítem, esta subejecutado en cerca de 300 millones de pesos.
Proyectando estos desvíos para todo el año, la cifra de fondos que no será ejecutada alcanzaría los 700 millones de pesos.
Otros datos para destacar:
* Hay obras que se repiten año a año en los últimos presupuestos, lo cual significa que no hay planificación y sobre todo, hay mucha ineficiencia de los organismos ejecutores.
* Las obras necesarias como las promocionadas "2.500 Viviendas" están atadas a un instrumento de crédito público nacional, donde la provincia de Neuquén todavía no ha realizado ninguna instrumentación del fideicomiso, por parte de la Upefe. Por lo tanto, al 31 de mayo, estas obras incluidas en el presupuesto 2010 tienen ejecución cero en un escenario, paradójicamente, de fuerte déficit habitacional.
* Se construyen costosos gimnasios y las obras viales (desarrolladas por empresas ligadas al poder de turno) demandan mucho crédito presupuestario. No hay programación alguna sobre las mismas, ¿Cuándo fue la fecha de inicio? ¿Cuándo finaliza? ¿Cuál es el costo por metro cuadrado en las obras civiles, en metros lineales en obras de ingeniería, en kilómetros de obras viales? Todas estas son preguntas que, hasta la fecha, no tienen respuesta y marcan la falta de control y eficiencia en la utilización de los fondos públicos.
* Hay obras que hace tiempo demandan los ciudadanos como es el caso de los trabajos de tratamiento de líquidos cloacales, agua potable y las viviendas, todas ellas obras que a la fecha se encuentran sin resolución pese a que están disponibles las partidas para su ejecución.
¿Por qué el gobierno no utiliza estos fondos?
Como mencionamos párrafos arriba, la obra pública es lo primero que se "corrige" cuando un gobierno quiere encuadrar su presupuesto.
Pero muchas veces es la falta de gestión lo que imposibilita la utilización de los fondos públicos para la ejecución de obras.
En esto hay que dejar en claro que la mayor parte de los recursos encuadrados dentro del presupuesto para la obra pública no son de libre disponibilidad, o sea que el gobierno de turno no puede disponer de ellos para, por ejemplo, destinarlos a gastos corrientes.
Hoy la mayor parte de las dependencias que cuentan con fondos disponibles para obras están trabajando con subejecuciones. Estos son algunos ejemplos.
- La Subsecretaría de Obras Públicas tiene un presupuesto para gastar en todo el 2010 cercano a los 74 millones de pesos, pero a la fecha sólo ejecutó 18 millones.
- El Poder Judicial prevé un presupuesto para obras de 86 millones de pesos y lleva ejecutados 800.000 pesos.
- El Instituto Provincial de la Vivienda (IPVU) tiene disponibilidad para gastar algo más de 53 millones aunque sólo gastó 3 millones.
- La Unidad Ejecutora Externa (Upefe) tiene un presupuesto de 266 millones y el ejecutado a la fecha no llega al millón de pesos.
En definitiva, la subejecución ayuda a equilibrar el presupuesto.
Nada más.