Una nueva regulación del Banco Central, que entró en plena vigencia a partir de abril, modificó el tablero para lo que se conoce como el negocio de wealth management, esto es el asesoramiento a inversores ricos con cuentas en el exterior.
La resolución A 4981/09 reforzó los registros de este tipo de operaciones en el país, a la vez que aumentó los requisitos que deben tener los bancos extranjeros con representación local.
El espíritu de la norma es que, con los mayores controles, estos bancos no encuentren vericuetos legales para poder captar nuevos depósitos para llevarlos al exterior, ni realizar operaciones de cambio, sin pasar por los controles locales del Central.
Cerca de 40 entidades extranjeras que tienen representación local quedaron alcanzadas por la norma y, según fuentes del mercado, son alrededor de 15 los que decidieron bajar totalmente la persiana.
A modo de ejemplo, Wells Fargo (dueño de Wachovia tras completarse la fusión) "está en proceso de cierre" de su oficina local.
Otro caso similar que está mudando su unidad de negocios a Miami es HSBC. Credit Suisse sigue el mismo camino.