Desgaste.
Hasta hace poco la ministra de Industria, Débora Giorgi, mantenía una imagen excelente dentro del gabinete, pero parece que la situación cambió en los últimos días.
El disparador de un creciente malestar de la Casa Rosada con Giorgi ha sido el conflicto que se está dando con China.
Se sabe que algunos funcionarios de Casa de Gobierno han responsabilizado a la ministra de un manejo poco estratégico en las restricciones al ingreso de productos del gigante asiático.
"Creemos que hubo una estrategia poco medida en términos de las consecuencias que podría tener para el país exagerar una medida como es la aplicación de antidumping", subrayó un funcionario gubernamental.
En la cúpula de la Quinta de Olivos todavía no se ha adoptado una decisión concreta. Se está a la espera de que el conflicto con China se pueda reencauzar.
Igualmente, se resolvió recortarle poder de decisión a Giorgi. La prueba está en que en la última semana fue designada Mirta Díaz como nueva subsecretaria de Industria, una persona del riñón de Aníbal Fernández, sin que Débora Giorgi haya podido ni siquiera opinar sobre el tema.