Esta brecha se debió a la diferente composición de tributos que nutre cada uno de los ingresos tributarios: mientras a nivel nacional influyó el bajo crecimiento de Ganancias (3,6%) y el IVA (8,9%), a nivel provincial incidió la mayor variación de Ingresos Brutos (19,6%), que explica más de un 70% de la recaudación de las provincias.

En este caso, parte del aumento se debió a la suba de alícuotas llevada a cabo en varias jurisdicciones, como son la provincia de Buenos Aires, Córdoba y la Ciu-dad Autónoma de Buenos Aires.

Erogaciones

Por el lado del gasto, el crecimiento de las erogaciones de las provincias se ubicó por encima del 20% interanual.

Dentro de las jurisdicciones analizadas, las únicas que tuvieron incrementos inferiores al 10% fueron las provincias de Santiago del Estero y San Juan, que debieron realizar un mayor ajuste en sus gastos a causa del menor crecimiento en sus ingresos.

Las remuneraciones al personal fueron las que mayor incidencia tuvieron en el aumento de las erogaciones, por ser la partida con mayor participación dentro de la estructura del gasto provincial.

Dentro de los casos analizados, la variación de la partida de salarios se ubicó entre el 16% (Entre Ríos) y el 30% interanual (Salta).

obra pública

En cambio, mayor dispersión se observó en lo que refiere a la obra pública: mientras que en algunas provincias el aumento fue inferior al 20% (Formosa, Neuquén y Santa Fe), en otras superó el 65% interanual (Entre Ríos, Mendoza y Río Negro).

Dentro de las jurisdicciones analizadas, las únicas dos que presentaron caídas en los gastos de capital fueron las provincias de Santiago del Estero y San Juan que, a su vez, son las que más desaceleraron el crecimiento del gasto total.

Dadas las tendencias observadas en la ejecución presupuestaria relevada, la proyección realizada por Abeceb.com es que el año 2009 habría cerrado con un déficit primario de $ 10.100 millones (-0,9% del PIB) para el consolidado de las 24 jurisdicciones, que luego del pago de intereses se habría traducido en un déficit financiero de $ 13.300 millones (-1,1% del PIB).

Esto sería el resultado de una estructura de gasto poco flexible que creció (23%) por encima de unos ingresos deprimidos por la recesión local (18%), consolidándose por tercer año consecutivo un resultado financiero negativo y creciente.

Perspectivas para el 2010

Las provincias arrancan este año con un punto a favor: la recuperación económica repercutirá positivamente en sus ingresos, incluso más de lo que prevén sus presupuestos que se basan en las proyecciones de crecimiento de 2,5% e inflación de 6,1% de la administración nacional.

Los ingresos por coparticipación y regímenes especiales presupuestados para el 2010 alcanzan los $ 83.655 millones, lo que implica un incremento de 10,6% con respecto la 2009.

Dicha proyección se basa en una previsión de recaudación tributaria nacional que se encuentra subestimada en vistas al crecimiento que tendrán el Producto Interno Bruto (PIB) y la inflación en este año. El informe de Abeceb.com estima que los envíos automáticos podrían incrementarse cerca de un 20% respecto a los del 2009.

Por el lado de la recaudación tributaria provincial, se suman los aumentos de alícuotas y reformas a las leyes tributarias que varias jurisdicciones aprobaron para dar un impulso adicional al crecimiento de sus ingresos tributarios, a costa de una mayor presión fiscal. Nuevamente hicieron punta las provincias de Buenos Aires, Córdoba y la Ciudad de Buenos Aires.

Mayores recursos

Los ingresos de capital, por otra parte, se verán impulsados por la cosecha récord de soja, que incrementará los envíos por el Fondo Federal Solidario. Todos estos factores llevan a proyectar un incremento de los recursos totales provinciales del orden de 25% para el 2010.

Por el lado de las erogaciones, será clave el comportamiento de la partida de remuneraciones, ya que representa cerca de un 50% del gasto total provincial. En este marco, las paritarias con los docentes cobran especial relevancia, ya que marcan una referencia de incremento salarial para el resto de los gremios que deben acordar con los Estados provinciales.

En febrero, la paritaria nacional con los maestros fijó un incremento en el salario mínimo de 23,4% para el 2010, marcando un piso en los reclamos en la negociación provincial. En el 2009, el incremento otorgado a nivel nacional (15,5%) no pudo ser replicado por todas las jurisdicciones. Este año, los primeros acuerdos marcaron un mayor acercamiento a la pauta nacional, como en el caso de la provincia de Córdoba (21%), Buenos Aires (24%) y la Ciudad de Buenos Aires (23%). Sin embargo, hay otras jurisdicciones en donde la oferta por parte del gobierno provincial continúa por debajo de la pauta nacional y siguen las negociaciones, como en el caso de la provincia de Santa Fe (7%).

Si todas las jurisdicciones acataran en promedio la pauta de incremento salarial avalada a nivel nacional tanto con los docentes como con el resto de los gremios, la partida de remuneraciones al personal podría incrementarse, para el consolidado de las 24 jurisdicciones, en cerca de un 30% interanual. Cabe recordar, que con una pauta inicial de 15,5% para los docentes en el 2009, la partida global se vio incrementada en un 24/25% en ese año.

Tal incremento en la partida de remuneraciones imprime una fuerte inercia al crecimiento del gasto primario en el 2010. De hecho, si el resto de las partidas de las erogaciones se mantuvieran constantes, el mismo tendría un piso de crecimiento del 16%, únicamente por efecto de aumento de la masa salarial.

En cambio, si el resto de las partidas del gasto provincial (incluyendo la obra pública) crecieran a un ritmo similar a la tasa de inflación esperada para este año (+20%), el gasto primario alcanzaría una variación interanual de 27%, superando nuevamente el incremento esperado en los ingresos (25%). Esto daría lugar a un déficit primario de 1,1% del PIB ($ 15.500 millones), lo que superaría tanto en términos nominales como el términos del Producto el proyectado para el año 2009.

Ahora bien, ¿qué pasaría si las provincias lograran ubicar el crecimiento del gasto primario apenas por debajo de los ingresos, por ejemplo, a una tasa del 24%? En este caso, el déficit primario sería inferior en términos del PIB al proyectado para el año 2009 (-0,8% del PIB) e implicaría un esfuerzo por contener el aumento de la partida salarial por debajo del 27% y el resto de los conceptos del gasto por debajo de la inflación esperada para el 2010, por ejemplo en un 17% interanual.

En ambos escenarios, lo que se proyecta es la continuidad de un déficit primario abultado para el consolidado de las 24 jurisdicciones en el 2010 y cercano al 1% del PIB, consolidándose, de esta manera y por tercer año consecutivo, un resultado primario negativo.

n lo que va del año, hay pocas provincias que han hecho público el resultado del cierre de sus cuentas fiscales en el 2009. La mayoría de las jurisdicciones que suelen publicar información en los términos de la ley de Responsabilidad Fiscal posee datos referentes al mes de septiembre, octubre o noviembre del año pasado, según consignó en un reciente informe Abeceb.com.

En el estudio se tomó como insumo la información publicada por trece jurisdicciones a fin de identificar las principales tendencias de las cuentas provinciales en el 2009.

Desde el punto de vista de los ingresos, el año pasado se observó una gran dispersión en las tasas de crecimiento: mientras en algunas jurisdicciones el aumento fue inferior al 10% (Santiago del Estero y San Juan), en otras superó el 30% interanual (Entre Ríos y Neuquén).

En general, los ingresos de capital crecieron más que los ingresos corrientes. Esto se debió, principalmente, a que dentro de las transferencias de origen nacional se incorporaron los envíos por el Fondo Federal Solidario (FFS, coparticipación del 30% de las retenciones a la soja y derivados), lo que significó un giro de $ 2.940 millones adicionales a las provincias con afectación específica a obra pública en el 2009.

Dentro de los ingresos corrientes, y en particular los tributarios, los recursos provinciales crecieron a una tasa superior a la coparticipación y regímenes especiales. De hecho, en el consolidado de las 24 jurisdicciones, los primeros aumentaron un 18,5% en el año frente al 9,2% de los envíos de origen nacional.