La compañía Codorníu cerró su último ejercicio fiscal (de julio del 2008 a junio del 2009) con pérdidas de 2,9 millones de euros, frente al beneficio de 7,2 millones del anterior, en un contexto marcado por la crisis y caída del consumo de vino.
También otras de las sociedades del grupo catalán registraron números rojos, como la filial estadounidense Codorníu Napa y otras divisiones como Codorníu Argentina, Codorníu Finland y Codorníu Deutschland, entre otras.
La sociedad Codorníu alcanzó una cifra neta de negocios de 185 millones, frente a los 215,3 millones del ejercicio anterior, en un año en el que la venta de vinos espumosos en el mercado español bajó un 8,7% en volumen y un 13,1% en valor, según datos de la consultora Nielsen a los que alude la compañía en su informe.