Al igual que lo observado en el 2009, los vencimientos de capital que deberán afrontar las provincias durante este año son equivalentes al monto del déficit financiero proyectado: 13.000 millones de pesos.

De esta manera, consolidando ambos conceptos se llega a una necesidad global de financiamiento de 26.000 millones para el 2010, equivalentes a 6.810 millones de dólares y a casi dos puntos del producto. Como se puede ver, el monto necesario para cerrar el balance financiero 2010 es prácticamente idéntico al Fondo del Bicentenario.

Los remanentes de ejercicios anteriores presentarían una fuerte caída respecto del 2009 (-71%) producto del mencionado deterioro fiscal subnacional y apenas alcanzarían a cubrir el 3% del financiamiento necesario (820 millones).

En lo que respecta al endeudamiento en títulos y préstamos (5.000 millones de pesos), se contemplan las autorizaciones vigentes en las leyes de presupuesto provinciales. Esta fuente permitiría cubrir el 20% de los fondos necesarios siempre y cuando las provincias encuentren mercados donde colocar deuda en forma voluntaria, hecho íntimamente ligado al grado de avance que presente el canje de deuda nacional tanto en apertura de mercados como en los niveles de tasa de colocación. En caso de que las provincias no lograran colocar deuda, la Nación debería asistirlas con 20.600 millones, lo cual incluye el Programa de Asistencia Financiera (PAF) por casi 12.000 millones, el monto equivalente a los títulos no colocados y la deuda flotante generada a lo largo del ejercicio.

El resto de las fuentes de financiamiento no presentará dificultades para su obtención, por un total de 4.700 millones.

(Fuente: E&R)