El rey Juan Carlos de España y su familia también tendrán que apretarse el cinturón debido a la grave crisis que vive el país ya que, por primera vez, el gobierno decidió congelar la asignación del Estado para la casa real, que en el 2010 se quedará en 8,9 millones de euros (unos 13 millones de dólares). Según el proyecto de los presupuestos generales del Estado para el 2010 que la ministra de Economía, Elena Salgado, entregó esta semana al Congreso, la casa real dispondrá el año que viene de la misma cantidad que le había sido asignada en el ejercicio anterior. Ésta es la primera vez que el rey ve congelado el aporte que por ley recibe del Estado “para el sostenimiento de su familia y su casa”, si bien en los años anteriores esa asignación se ha ido moderando, ya que en el 2009 sólo aumentó un 2,7% respecto del 2008 y ese año, un 4,5% en comparación con el 2007. En esta ocasión fue el propio monarca el que, meses atrás, pidió al gobierno no aumentar esa cantidad, como muestra de solidaridad por la profunda recesión en la que está sumida España. Sin embargo, a la partida que habitualmente recibe la familia real hay que añadir otros gastos que corren por cuenta de diferentes ministerios. (AP)