Chile aumentará la importancia del carbón en su matriz energética de un 17 a un 25% en los próximos años, un recurso seguro y barato que contribuirá a la estabilidad energética del país pese a ser contaminante, dijo el jueves el ministro de Energía chileno Marcelo Tokman. "La salida a corto plazo no podía ser de una forma distinta que con las centrales de carbón que se están construyendo en este momento", dijo Tokman en un encuentro con corresponsales extranjeros aludiendo a la crisis energética que se desató en Chile cuando Argentina comenzó a recortar sus envíos de gas natural. "Por los plazos, no había otra forma de que recuperáramos la seguridad energética", insistió el ministro.
A mediados de la década de 1990 Chile llegó a un acuerdo con Argentina para el envío de más de 20 millones de m3 diarios de gas natural, pero las exportaciones comenzaron a recortarse a partir del 2004 por un aumento en la demanda interna argentina. En las últimas semanas Chile recibió unos 500.000 m3 diarios de gas argentino, dijo Tokman.
En los años noventa el carbón representaba un 25% de la matriz energética del país mientras que ahora representa un 17% por la entrada del gas natural argentino. Hacia el 2020, el carbón volverá a ubicarse en los niveles anteriores al acuerdo con su vecino, dijo Tokman, por la operación de nuevas plantas a base de carbón. "Para el país no sería sustentable un crecimiento de la matriz basado fundamentalmente en el carbón", aseguró el ministro, insistiendo en que el carbón no crecerá más allá del 25% en la matriz energética por ser altamente contaminante. Debido a los recortes de gas argentino Chile construyó una planta de regasificación de gas natural licuado en la costa central del país.