Algunas variables muestran que en el segundo semestre podría comenzar la recuperación de la economía argentina, algo que dependerá mucho del manejo de la política a partir de mañana. Si todo se conduce de manera racional -cosa que no siempre ocurre en nuestra Argentina- y el Ejecutivo realiza los ajustes necesarios para corregir los desvíos del modelo, esta probable recuperación se trasladará a los balances de las empresas y sus acciones buscarán nuevos techos en la segunda parte del año.

Si bien la bolsa argentina fue una de las que más crecieron desde comienzos del 2009, con una suba del orden del 38%, no hay que descartar que esta tendencia se mantenga a partir de mañana. En junio el Merval cedió un 5% producto de la incertidumbre generada antes de las elecciones. El dato no es menor ya que habla de la relación que existe entre la política aplicada y la economía real. Sin embargo, esta caída es histórica: antes de cada elección, los inversores toman sus precauciones y se retiran del mercado hasta saber quién tendrá el timón de la política. En octubre del 2007 el Merval había tocado los 2.400 puntos, por lo tanto no son pocos los operadores que apuestan a esta alternativa teniendo en cuenta todo el camino que queda por recorrer. Para algunos analistas no existirá una gran devaluación, como muchos pronostican. Por lo tanto quien no entró en la compra de divisas hasta ahora, con la que se ganó en un año más del 25%, lo prudente sería no apostar al billete norteamericano, salvo que la inversión a realizar sea de largo plazo, donde el escenario cambia drásticamente para la Argentina. Para ingresar en la bolsa, con la compra de acciones, sería prudente que el ahorrista consultara a especialistas en el tema o se acercara a los bancos con los que trabaja para saber con qué herramientas cuenta para acceder a este tipo de inversión. Existen los FCI en manos de los bancos, que son herramientas ligadas, en algunos casos, a las acciones de la bolsa.

Javier Lojo

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