En los últimos días, un número importante de inversores argentinos efectuó su consulta respectiva y gran parte de ellos decidió invertir ahorros en el mercado accionario de EE. UU. Sin embargo no lo hizo en cualquier acción. El papel de Citigroup (C) tuvo su castigo pero -ahora- lo peor parece haber pasado. Claro que sufrió numerosos recortes en su precio desde los u$s 55 que llegó a valer allá por mediados del 2007 hasta el u$s 2,70 a los que cerró esta semana.
Sin embargo, siempre existen aquellos que con baja aversión al riesgo y algunos billetes se animan a todo. Y el papel del Citi parece haberse prestado a este juego. Si algún inversor adicto a la especulación estuvo alerta y decidió que era buen momento para comprar el 5 de marzo último cuando el papel llegó a valer u$s 1,02, entonces el afortunado obtuvo un resultado de 170% de incremento en el valor de la acción.
Claro que el momento decisivo se lo dio el CEO de Citigroup, Vikram Pandit, cuando el 11 del corriente dijo que la empresa había obtenido buenos números en enero y febrero y que las expectativas para el primer trimestre eran inmejorables. Esto justificó el bonus de fin de año que recibió Pandit que llegó a los u$s 11 millones.