La compañía cervecera holandesa Heineken se embarcará en una amplia operación de recorte de costes que podría incluir despidos, informó la empresa. Heineken facturó en el 2008 14.300 millones de euros (18.060 millones de dólares), lo que supone un 27% más que en el 2007. Sin embargo, los beneficios antes de impuestos experimentaron un retroceso del 24%, hasta los 1.080 millones de euros (1.360 millones de dólares).
Esta regresión responde, entre otros motivos, a los altos costes del combustible y a la depreciación de la libra esterlina. Ahora el productor de cerveza holandés recortará los costes en 400 millones de euros y reducirá la inversión de capital.